El pasado lunes 26 de
julio tres jugadores de fútbol quindianos, Cristian David Mosquera, Juan José
Patiño y Alejandro Guzmán, pertenecientes a la escuela Vasco Da Gamma, viajaron
a Cali a probar suerte en el equipo de fútbol de América de Cali. Uno de ellos logró
ser aceptado en el Club Atlético de Mineiro: Alejandro Guzmán.
Alejandro quien ahora juega como delantero y se toma muy enserio su pasión por el fútbol, hace siete u ocho años, cerca del 2013, jugaba este deporte solo por diversión en la cancha del barrio Cañas Gordas de Armenia, y aunque muchas personas le decían que lo hacía muy bien, solo se tomó enserio su talento cuando conoció al entrenador Faber Tapiero.
“Él fue una de las personas que me hizo abrir los ojos para desarrollar el talento que tenía, me abrió las puertas en la escuela de fútbol Vasco Da Gamma y fue el que me formó como el futbolista que soy hoy en día”, expresa Alejandro.
Faber Tapiero, entrenador y dirigente de la escuela de fútbol Vasco Da Gamma, fue la única persona que, hace cinco o seis años, le brindó la mano para formarlo como el deportista que es ahora Alejandro. “Pienso, en realidad, que él es una gran persona, siempre pude contar con él para todas mis ambiciones futbolísticas. Gracias a él y a muchas personas más estoy donde estoy en estos momentos”.
¿Por qué el fútbol y no otro deporte?
He practicado varios tipos de deportes pero ninguno me producía la emoción, la pasión, la ansiedad que me produce entrar a una cancha de fútbol. Ponerme en ese entonces el uniforme de la escuela de fútbol Vasco Da Gamma y sentir que me tenía que romper por ese escudo, para mí era lo mejor, nada me hacía sentir así y el futbol es ahora el estilo de vida que quiero para mí.
¿Cómo ha sido el camino para ser un jugador destacado?
Para ser un jugador destacado en realidad pienso que fue un proceso complicado. Como todo, no es fácil, tiene sus sacrificios. Pero, siempre desde un principio, tuve personas que me brindaron la mano y me ayudaron para mi formación, una de las personas que voy a destacar siempre es al profesor Faber y mi familia, gracias a Dios, que nunca me dieron la espalda. El apoyo, la motivación, la constancia de ellos fue lo que me hizo volver lo que soy ahora.
Como todos los casos similares al mío, destaco a mi madre que es la que siempre ha estado para mi, la que jamás me dio la espalda, la que se partía el lomo para yo poder ir a una práctica a jugar fútbol. Destaco a mi profesor Faber, que aunque no es de mi familia, lo considero parte de ella, por todos los buenos momentos que hemos pasado, porque siempre ha estado para mi. Son personas que amo mucho y ante todo, como futbolista, me enseñaron buenos valores y me formaron como persona.
¿Cómo se siente en esta nueva etapa que empieza?
Esta nueva etapa de mi vida me siento genial. Es un honor y me siento orgulloso de mi mismo porque, pues, a pesar que no estoy donde quiero llegar, he dado un pequeño paso que para mi es muy importante, ya que, lastimosamente, a los deportistas quindianos no es que nos apoyen mucho en nuestras aspiraciones como deportistas, entonces pienso que este pequeño paso es algo muy importante para seguir en mi proceso como futbolista.
¿Cuáles son las expectativas que tiene?
En estos momentos una de las principales expectativas que tengo, y en lo cual estoy más enfocado, es irme al valle y entrenar muy fuerte, ganarme mi puesto y marcar la diferencia, porque para mí sería un orgullo como quindiano estar debutando en el futbol profesional colombiano.
Durante ocho días, Alejandro mostró sus capacidades futbolísticas entrenando de manera intensiva. Se hicieron trabajos tanto técnicos como físicos y, luego de cinco días, los ex jugadores del Deportes Quindío, Wilber Quiñone y Juan Gilberto Núñez “Pichu” y el ex jugador de la selección Colombia, Héctor Landazuri, le dijeron a Alejandro que les gustaría contar con sus servicios para el Club Atlético de Mineiro, que tiene convenio con el América de Cali y algunos equipos profesionales en el futbol colombiano.
¿Algún mensaje para los jóvenes que quieren ser jugadores de fútbol?
Para todos los jóvenes de mi edad lo único que les puedo decir es que no dejemos de entrenar, hagámoslo con constancia, todo es con sacrificio, con esfuerzo, con dedicación. Así es que se van consiguiendo los logros en la vida. Es simple, si queremos que el futbol sea nuestro estilo de vida hay que hacerlo parte de nuestra vida. No se den por vencidos, todo es un proceso, paso a paso se va avanzando y así se van subiendo cada vez más escalones.