A través de la secretaría de Salud, se participó en la Comisión Regional de Moralización, liderada por la Contraloría General de la República y con la presencia de la Procuraduría, Defensoría del Pueblo y Superintendencia de Salud. En el encuentro, el agente interventor de la Nueva EPS, Julio Alberto Rincón Ramírez, explicó las medidas que se implementarán tras la intervención, enfocadas en agilizar el giro de recursos y aliviar la crisis de la red de servicios de salud en el departamento, agravada por deudas pendientes con las ESE e IPS de la región.
Al evento asistieron alcaldes, gerentes hospitalarios, directivos de IPS públicas y privadas, y representantes de otras EPS con usuarios en el Quindío. Los asistentes manifestaron su preocupación por el incumplimiento de acuerdos de pago y la falta de claridad sobre la cancelación de deudas, especialmente aquellas mayores a 360 días. Se advirtió que la recuperación del sistema depende de recibir los pagos pendientes y establecer acuerdos sobre obligaciones de vigencias anteriores.
El secretario de Salud del Quindío, Carlos Alberto Gómez Chacón, resaltó la urgencia de una solución inmediata para el pago de recursos y el reconocimiento de las deudas acumuladas, señalando que la cartera pendiente en el departamento supera los 560.000 millones de pesos.
Como resultado de la reunión, se estableció que el próximo 19 de noviembre se realizará una mesa de trabajo para depurar cuentas y esclarecer deudas entre Nueva EPS, Asmet Salud y las instituciones de salud del departamento. Asimismo, se programó una reunión entre la Nueva EPS y la clínica La Sagrada Familia para reactivar los servicios a sus usuarios.
Fuente: Oficina de Comunicaciones Gobernación del Quindío