viernes, noviembre 22, 2024

Tumaco perdió importante inversión extranjera para construcción de la sede de la Universidad Nacional por incumplimientos

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A pesar de haber recibido 12 millones de dólares de la embajada de Holanda, el avance es solo del 21% y se han reportado problemas con el contratista. Recientemente, Invest International anunció la suspensión de su participación en el proyecto, citando retrasos y falta de progreso. Los estudiantes exigen respuestas urgentes de la universidad sobre el futuro del campus prometido.

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La construcción de la sede de la Universidad Nacional de Colombia en Tumaco, un proyecto que prometía transformar una de las regiones más afectadas por el conflicto armado en el país, se encuentra paralizada y rodeada de polémica. Iniciado en diciembre de 2017, el proyecto, que recibió un aporte de 12 millones de dólares de la embajada de Holanda, no ha avanzado y ha generado múltiples quejas por parte de los estudiantes.

A más de tres años del vencimiento del contrato con Miroal Ingeniería SAS, la obra se detuvo con un avance del 21% y ha sido criticada por su estado de abandono, donde materiales de construcción, como bloques de cemento y varillas de acero, se encuentran expuestos a las inclemencias del clima. Estudiantes denuncian que estos materiales podrían deteriorarse y afectar el futuro de la construcción.

La Universidad ha reconocido que se han entregado 10.800 millones de pesos desde el inicio del contrato, pero 20.000 millones permanecen en reserva a la espera de que un nuevo contratista asuma la obra. Este dinero es fundamental, dado que los estudiantes continúan utilizando containers como aulas de clase en condiciones inadecuadas.

Estudiantes expresaron su frustración por la falta de información y avances. «Es indignante ver el estado de la obra y la negligencia en su gestión. Estamos esperando respuestas claras sobre el futuro de nuestro campus», manifestó uno de los jóvenes.

Recientemente, Invest International, el inversor neerlandés involucrado, notificó la suspensión de su participación en el proyecto, citando repetidos retrasos y falta de cumplimiento por parte de la universidad. La carta enviada a las autoridades educativas evidenció la creciente preocupación por el estado del proyecto, el cual estaba destinado a contribuir al desarrollo de la región.

A más de tres años del vencimiento del contrato con Miroal Ingeniería SAS, la obra se detuvo con un avance del 21% y ha sido criticada por su estado de abandono, donde materiales de construcción, como bloques de cemento y varillas de acero, se encuentran expuestos a las inclemencias del clima. Estudiantes denuncian que estos materiales podrían deteriorarse y afectar el futuro de la construcción.

La Universidad ha reconocido que se han entregado 10.800 millones de pesos desde el inicio del contrato, pero 20.000 millones permanecen en reserva a la espera de que un nuevo contratista asuma la obra. Este dinero es fundamental, dado que los estudiantes continúan utilizando containers como aulas de clase en condiciones inadecuadas.

Recientemente, Invest International, el inversor neerlandés involucrado, notificó la suspensión de su participación en el proyecto. En una carta fechada el 9 de octubre, la entidad expresó: “La falta general de progreso en el proyecto y la continua incapacidad de la Nacional para cumplir con nuestros plazos finalmente llevaron a nuestro Comité de Inversiones a tomar la decisión de suspender nuestra participación en el proyecto”. Este anuncio ha generado una creciente preocupación sobre el futuro de la sede.

Estudiantes expresaron su frustración por la falta de información y avances. «Es indignante ver el estado de la obra y la negligencia en su gestión. Estamos esperando respuestas claras sobre el futuro de nuestro campus», manifestó uno de los jóvenes.

En respuesta a las inquietudes, la Universidad indicó que el contrato con Miroal Ingeniería finalizó el 23 de septiembre y actualmente se encuentra en etapa de liquidación. Las razones del retraso incluyen suspensiones unilaterales por parte del contratista y problemas en el cronograma de obras. La Universidad también aseguró que los costos hasta ahora son justificados y no se han reportado sobrecostos.

La situación ha llevado a los estudiantes a organizar reuniones con los directivos de la universidad, buscando claridad sobre los pasos a seguir y el futuro del proyecto. Con la construcción detenida y la incertidumbre en el aire, la comunidad académica de Tumaco se pregunta cuándo verán cumplidas las promesas de un campus que podría cambiar su realidad.

La situación ha llevado a los estudiantes a organizar reuniones con los directivos de la universidad, buscando claridad sobre los pasos a seguir y el futuro del proyecto. Con la construcción detenida y la incertidumbre en el aire, la comunidad académica de Tumaco se pregunta cuándo verán cumplidas las promesas de un campus que podría cambiar su realidad.

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