Santa Marta Al Día intentó contactarse con ellos y no quisieron hablar por miedo a represalias.
Como si la situación en cuanto a hurtos y asesinatos no fuera suficiente en Santa Marta, nuevamente se volvieron a presentar desmanes este jueves en el sector de la Vía Alterna al Puerto, entre los grupos de los barrios aledaños que hace dos meses habían cesado estos actos.
Por varias horas transcurrieron los enfrentamientos que tienen como protagonistas a cientos de jóvenes en su mayoría menores de edad, que pertenece a dos bandas denominadas ‘Los Rayos’ del barrio El Pantano y ‘Los 777’ de Bastidas.
Sin embargo, la situación en materia de seguridad en el barrio Bastidas además de estos enfrentamientos parece haber agravado, toda vez que los líderes comunales y sociales de esta localidad, se abstienen de dar declaraciones a los medios por temor a represalias en su contra.
El equipo periodístico de Santa Marta Al Día intentó en la mañana de este viernes comunicarse con varios de ellos para conocer la situación, no obstante, el mensaje de estos fue “no queremos hablar porque nos da miedo. La cosa en el barrio está muy crítica”.
Cabe recordar que desde la administración distrital se realizaron acercamientos con estos grupos en disputa, sin embargo, estos han denunciado que las ofertas institucionales que se les habría puesto a disposición, no han sido ofertas en la comunidad.
Una de las propuestas realizadas por las autoridades el 21 de abril del presente año, fue el fortalecimiento de los polígonos de seguridad de manera inmediata y la disposición de un CAI móvil a mediano plazo, pero esto según la comunidad se quedó en solo promesas.
Otro de los puntos que según los vecinos del sector tiene muy enojados a los jóvenes del sector de Bastidas, tiene que ver con el asesinato de Joel Ibañez, líder de los ‘777’ quien había sido amenazado en un panfleto, y no se le prestó la seguridad requerida para evitar el hecho que le quitó la vida el 20 de julio.
Ante este cumulo de situaciones nuevamente el sector de Bastidas se encuentra sitiado por la delincuencia común, y los líderes atemorizados de que sus vidas al igual que pasó con Joel, sean acabadas por las balas que no cesan en la capital del Magdalena.
Por esta razón claman que desde el orden nacional se realice una inversión en seguridad en Santa Marta, al igual de que se redoble el número de uniformados en este sector, que cada vez que ocurre un hecho en la Vía Alterna es insuficiente ante la cantidad de personas que participan en estos hechos.