La crisis hospitalaria por la que atraviesa el departamento, la alta ocupación en las unidades de cuidados intensivos (la cual ha superado el 95 % durantes los últimos días) y el colapso de las salas de urgencias y servicios de hospitalización llevaron a que el viceministro de salud, Luis Alexander Moscoso, le recomendara a los mandatarios locales de Risaralda que establezcan medidas como toques de queda o pico y cédula.
Según el funcionario, estas medidas permitirían disminuir el número de personas que requieren atención en UCI debido a accidentes de tránsito, riñas o alteraciones del orden público.
Asimismo, hizo un llamado a los risaraldenses para que no bajen la guardia y continúen cumpliendo con los protocolos de bioseguridad porque este pico de la pandemia ha llegado con mayor fuerza.
Por lo pronto, las únicas restricciones que se han tomado en Risaralda es la cancelación de los eventos masivos que se tenían programados en varios municipios.
Por otro lado, el viceministro indicó que las manifestaciones y jornadas de protesta en Colombia registradas en mayo generaron un aumento excesivo, durante el mes de junio, en el número de nuevos casos positivos y en los fallecimientos como consecuencia del coronavirus.
Finalmente, señaló que a las autoridades de salud nacionales les preocupa que en diferentes regiones del país ya se han detectado las nuevas variantes del COVID-19, varias de las cuales son más letales.
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