En Medellín, cientos de venezolanos mantienen la ilusión de un cambio en su país. Son muchas las huellas que les ha dejado la migración.
Raúl Olivo es un venezolano de 29 años y desde hace 6 salió de su país en busca de mejores oportunidades de vida. Trabaja en construcción y vive en Bello junto a su compañera y dos hijas. Él, como cientos de migrantes de Venezuela, mantienen la esperanza de volver a su país a reencontrarse con los suyos.
Las dificultades del día a día aumentan su ilusión de que las cosas cambien para un pronto regreso a Venezuela. Exaltan el apoyo de mandatarios locales para que se solucione la situación política actual de ese país.
En el estado Carabobo, familiares y amigos esperan el abrazo de Raúl Olivo.