A pesar de los constantes aguaceros de los últimos días, Antioquia todavía no se encuentra en la segunda temporada de lluvias del año. Las autoridades precisaron que estas se deben al paso de ondas tropicales y que esta semana se intensificarán.
De acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), el paso de dichas ondas tropicales incidirá en que ocurran fuertes lluvias entre el 23 y el 26 de agosto especialmente en las subregiones del Suroeste, Oriente, Valle de Aburrá y Bajo Cauca.
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“Es probable una activación importante de las precipitaciones, aumentando la amenaza de inundaciones y deslizamientos, entre otros eventos asociados a las fuertes lluvias. Invitamos a la comunidad y a los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo de Desastres a estar muy atentos”.
Jaime Enrique Gómez Zapata, director general Dagran.
@IDEAMColombia a través del CRPA nos informa que del 23 al 26 de agosto se tienen previstas fuertes lluvias en subregiones Suroeste, Oriente, Valle de Aburrá y Bajo Cauca de Antioquia por paso de ondas tropicales. Dagran atentos. Invitamos a comunidad y a municipios estar alertas pic.twitter.com/l4NSneJZ6a
— Dagran Antioquia (@DagranAntioquia) August 23, 2021
Nechí, el último que reportó inundaciones
Desde la semana pasada varios municipios del departamento han reportado afectaciones asociadas a las fuerte lluvias, principalmente, inundaciones en el Bajo Cauca antioqueño.
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Nechí fue el municipio epicentro de la última emergencia. El desbordamiento de los ríos Cauca y Nechí generaron inundaciones en 17 barrios de la zona urbana y en 12 veredas de los corregimientos Bijagual, Cargueros y Las Flores.
/FOTOS: DAGRAN.
Jaime Enrique Gómez Zapata, director general del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Antioquia (Dagran), precisó que 121 familias resultaron afectadas y que en la emergencia incidió la avería de uno de los diques ubicados en los laterales del río Cauca.
El funcionario explicó que para evitar que el agua siga ingresando a la zona poblada del municipio se instalaron costales con material a modo de jarillón.
Antes de la emergencia ocurrida en Nechí, Tarazá había declarado la calamidad pública para atender las inundaciones causadas en esa población por el desbordamiento del río Tarazá.
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