La crisis económica por la que atraviesa el sector transporte tiene de brazos cruzados a los más de 3.000 taxistas del municipio de Pasto.
Así lo manifestó el presidente de la asociación de taxistas, Alberto Lombana, tras precisar que desde que inició la cuarentena hasta la fecha, dicha agremiación ha sufrido serios problemas financieros.
El dirigente gremial sostuvo que la falta de recursos financieros para cubrir las deudas que tienen con los bancos obligó a cierto número de propietarios a vender sus vehículos y los cupos por debajo del valor real.
Explicó que un taxi y el cupo que normalmente cuestan entre $115 y $110 millones, ahora los pusieron a consideración del mejor postor en aproximadamente $70 millones. El dirigente gremial también dijo que la difícil situación financiera por la que atraviesan, a muchos padres de familia que obtenían el sustento como choferes no les quedó otra opción que quedarse en sus casas o dedicarse al rebusque.
Argumentó que cada día se incrementa la baja presencia de usuarios. Añadió que el toque de queda los está llevando a la ruina, tras explicar que durante los fines de semana alrededor de 500 taxistas que cuentan con radioteléfono o plataformas virtuales, son los únicos que pueden trabajar.
“Como si esos contratiempos no fueran suficientes este es el segundo fin de semana que pude salir a conseguir el sustento, primero por el toque de queda y segundo porque coincide con el pico y placa”, expresó.
Indicó que en cada día, los dueños de los taxis aspiran obtener entre $40.000 y $50.000. Con esos dineros subrayó que financian parte de los gastos que demanda el vehículo y sus seres queridos.
De otra parte argumentó que el transporte informal es otro factor que afecta a los taxistas de Pasto, por eso a la mayoría de ellos les ha sido difícil cumplir con la cuota diaria establecida por los dueños de los automotores.
“Pese a la preocupante situación financiera los dueños de los taxis seguimos pagando impuestos y cumpliendo con los seguros de ley”, dijo.
Agregó que frente a esos inconvenientes los taxistas mantienen el valor de las tarifas sin importar el destino de los pasajeros.