El Sindicato Único de Trabajadores de la Educación, Suteq, se manifestó frente a las instalaciones de la Gobernación del Quindío, exigiendo al gobernador la contratación de un coordinador para el Instituto Buenavista. Sin embargo, dicha solicitud choca con las disposiciones del Decreto 3020 de 2002, el cual regula los criterios para la designación de coordinadores en las instituciones educativas del país.
El Artículo 10 de este Decreto es claro en establecer que solo aquellas instituciones que atiendan a más de 500 estudiantes pueden contar con un coordinador, y la de Buenavista tiene 470 estudiantes. Además, se contempla un coordinador adicional para instituciones con más de cinco sedes o que atiendan a más de 6,000 estudiantes. El Instituto Buenavista no cumple con ninguno de estos requisitos, al tener menos de 500 estudiantes y no contar con más de cinco sedes (solo tiene una).
Por otro lado, el caso de la institución educativa San José Fachadas, de Filandia, es diferente. Esta institución, que cuenta con 288 estudiantes distribuidos en 18 sedes, ha sido aprobada para contar con un coordinador a partir del segundo semestre de 2024, como lo conoce su rector desde el pasado mes de mayo. Este martes se reportará el coordinador a San José Fachadas, el señor Jorge Ómar Jaramillo Giraldo. La dispersión geográfica de sus sedes, especialmente en áreas rurales, garantiza el acceso a la educación para los niños quindianos y justifica la necesidad de un coordinador según lo estipulado en el mencionado decreto.
La protesta de Suteq en torno al coordinador del Instituto Buenavista plantea serias dudas sobre el conocimiento de la legislación por parte del sindicato. Es preocupante que una organización de esta naturaleza no esté plenamente informada sobre las normativas que rigen el sistema educativo. Además, es cuestionable la decisión de involucrar a los estudiantes en una protesta que, en esencia, solicita algo que está expresamente prohibido por la ley.
Es reconfortante ver cómo Suteq, con su inquebrantable entusiasmo, lucha en favor de la educación, pero se debe cuidar de no desafiar abiertamente la legislación vigente, pues nada como un poco de desconocimiento de las normas para deslegitimar una protesta, y de allí que para una próxima manifestación sea importante que decidan informarse un poco más sobre las leyes que rigen aquello por lo que luchan y no terminar defendiendo lo indefendible.
Dado que es un tema nacional, el sindicato puede optar por conversar con el presidente Gustavo Petro (respectivo Ministerio), que bien puede propiciar cambios en favor de la comunidad educativa. Quizás entonces, con un cambio de normativa, el Instituto Buenavista pueda finalmente contar con un coordinador.
En ese sentido, en reunión que se cumplió en la Secretaría de Educación Departamental, con presencia de la secretaria de Educación Tatiana Hernández y de la diputada Jéssica Obando se determinó solicitar una mesa de trabajo con el Ministerio de Educación para que desde el Quindío se promueva el cambio de la obsoleta ley que rige el nombramiento de coordinadores y que hoy perjudica al Instituto Buenavista.
La protesta del Suteq pone de manifiesto la necesidad de una mayor formación y conocimiento en materia legislativa por parte de los sindicatos, para asegurar que sus demandas sean justas, viables, en consonancia con las leyes que rigen el sector educativo en Colombia y dirigidas a quien corresponde, pues como lo vemos en la lista de demandas, no tuvieron en cuenta la responsabilidad directa de las alcaldías y de organizaciones como las Empresas Públicas del Quindío, EPQ, en ítems como ausencia de agua potable en sedes rurales, para cuya solución se necesita del apoyo decidido de ambas (en especial de EPQ), que no solo se deben al sector urbano; precariedad en infraestructura educativa rural y urbana, tema concerniente a las alcaldías municipales, dueñas de las plantas físicas, así como vías terciarias.
También denuncian deficiencias en restaurantes escolares (infraestructura y menajes) y falta de docentes, cuya planta está viabilizada en una cifra cercana al 100%, pero que presenta novedades como renuncias y licencias, las cuales deben ser suplidas respetando la lista de elegibles.
¿Es solo un cliché parar el tráfico frente a la Gobernación, sin analizar a fondo las responsabilidades?, ¿la mira apunta al lugar al que debe apuntar? Frente a lo anterior, surge una pregunta más: ¿fue la protesta del viernes 12 de julio, en el corazón de la ciudad, bajo todos los focos, un acto político, dado que las elecciones de la junta directiva del Suteq se cumplirán el próximo 26 de julio? A Dios lo que es de Dios, y al César lo que es del César.
Opinión por Finito
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