La Unidad de Reacción Inmediata Ambiental de la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ) realizó una inspección en el barrio Pizarra, Circasia, tras recibir una denuncia ciudadana sobre una posible contaminación del río Roble debido a vertimientos provenientes de una obra de construcción en la zona.
Durante el recorrido, los funcionarios identificaron la instalación de placas huellas y una estructura para el manejo de aguas lluvias, que incluye una tubería ubicada en la margen izquierda de la vía, culminando en un punto crítico donde se observó la disposición inadecuada de residuos de construcción y demolición (RCD). A pesar de esto, la inspección no halló evidencia de que el conjunto residencial en construcción, ubicado en la calle 7 No 21A-20 del barrio Pizarra, esté conectado a esta infraestructura.
El proyecto habitacional en cuestión cuenta con las licencias de movimiento de tierra y urbanismo números 272 y 273 de 2023, lo que asegura su cumplimiento con la normativa en vigor. La Alcaldía Municipal aclaró que las obras de drenaje y las placas huellas están a cargo de la Gobernación del Quindío. Además, precisó que, una vez finalizado el conjunto residencial, este se conectará al sistema de alcantarillado operado por Empresas Públicas del Quindío (EPQ).
Las autoridades ambientales continúan monitoreando la situación para garantizar que no se produzcan vertimientos ilegales al río Roble y asegurar el correcto manejo de los residuos de construcción en la zona.