Varios hospitales del departamento de Antioquia, han suspendido la atención médica a los afiliados de la Nueva EPS debido a una deuda de aproximadamente $189.000 millones, acumulada hasta marzo de este año. Esta medida afecta a cerca de 7 mil personas, quienes se quedarán sin acceso a servicios de salud hasta que la EPS realice los pagos pendientes correspondientes al último trimestre.
La falta de recursos ha dejado a estos centros hospitalarios sin la capacidad financiera para cubrir nóminas, comprar medicamentos y atender los gastos operativos esenciales.
Este panorama ha generado preocupación en otros departamentos como el Quindío, donde la Nueva EPS también enfrenta deudas significativas con diversas instituciones de salud.
En Armenia, el Hospital Departamental Universitario San Juan de Dios reportó al mes de julio, una deuda de más de $21.000 millones, mientras que la Clínica La Sagrada Familia y la Clínica Central del Quindío tienen pendientes por cobrar $84.000 millones y $3.000 millones respectivamente.
Pese a esta situación, la gerente de la entidad, Diana Carolina Castaño, aseguró que, hasta el momento, la atención a los afiliados de la Nueva EPS no se ha interrumpido en Armenia. “Confiamos en que la Nueva EPS continúe con los giros directos, gracias a la intervención de la Contraloría, la Procuraduría y la Personería, hemos logrado conciliar la deuda total y ya tenemos actas de conciliación firmadas, lo que nos permitirá cobrar de manera más efectiva”, indicó Castaño, dando un mensaje de tranquilidad a los pacientes.