Indolencia en el barrio Popular, habitantes de la la zona denuncian un envenenamiento de por los menos cuatro gatos a los que una mujer les habría suministrado en una lata de sardinas veneno para matarlos.
Los visitantes que llegan a esta casa del barrio Popular 1 de Medellín, son recibidos por perros y gatos, son ellos los que saludan e invitar a pasar, y es que, no se trata de un albergue, sino de una familia que desde hace 10 años y por circunstancias de la vida, comenzó a recoger animales, que en muchos casos estaban a punto de morir en la calle.
Darnelly Quintero – Cuidadora de animales » Mi amor a los animales nació un día que fuimos a pasear y nos encontramos a Dixon, bajo de un puente, entonces nos lo trajimos, mi amor por los gatos, empezó con un gatito también en muy mal estado, nosotros empezamos a dejarles comida y agua y empezaron a llegar mucho animalitos detrás del cuido»
En esta vivienda habitan 11 gatos y 4 perros, pero constante de la calle llegan otros más a alimentarse y en muchas ocasiones a dormir, sin tener más que su buena voluntad y unión familiar y en ocasiones apretando en las necesidades de la casa, acá les garantizan una cama, agua y comida.
Adriana Acevedo – Cuidadora de animales «Hacemos la forma de conseguirles un hogar, de esterilizar los que no consiguen un hogar lo tenemos en camitas, es como aportar un granito de arena con tanta indiferencia con los animales»
Pese a que con el paso del tiempo los vecinos también han tomado conciencia y en lugar de maltratarlos los cuidan y protegen, una persona intentó matarlos. Les dejó en la comida un veneno, que tiene entre la vida y la muerte a una gata y 3 más están desaparecidos.
Adriana Acevedo – Cuidadora de animales «Ya habían amenazas de los vecinos porque sencillamente los animales son animales , se hacían popó afuera y a la gente le molestaba, cuando nos dimos cuenta yo hice el reclamo y le pregunte el por qué lo hizo y dijo que los iba a envenenar a todos, llamamos a la Policía, pero nunca llegó»
Con una cartel en la ventana de su casa, está familia y otros vecinos piden respeto por la vida de los animales que son seres indefensos, son los humanos los que deben velar por el bienestar de ellos.
La mujer señalada de haber cometido el envenenamiento de los gatos, tomó su maletas y se fue, los vecinos no saben si regresará.
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