Luis Miguel Londoño Montoya, el busero que ayudó a las 3 personas con discapacidad. /FOTOS: CORTESÍA
La labor de un busero es netamente de servicio al cliente y eso es algo que Luis Miguel Londoño Montoya tiene muy claro en esta vida.
Este joven de 22 años, conductor de uno de los buses que presta servicio de Carmen de Viboral – Medellín, se hizo viral en días pasados y él aún no entiende por qué.
Q’HUBO compartió el video de este busero cargando a 3 personas con discapacidad, para que pudieran subir y poder acceder al servicio de transporte público.
Luis Miguel no entiende por qué lo viral, por 2 razones: él ni siquiera sabía que lo estaban grabando (fue una cámara de seguridad) y su acto le pareció algo muy común.
“No sé por qué el mundo se sorprende por un acto de estos. A mí no me parece algo del otro mundo, pero como que la sociedad hoy en día está tan mal, que nadie es capaz de colaborarle a nadie”, expresó en entrevista con Q’HUBO.
El video del busero ayudando a las 3 personas con discapacidad
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Este busero de noble corazón también nos contó que llegó a ver a las 3 personas con discapacidad por pura casualidad.
Y es que estas personas no viajaron en su buseta, sino en la de un colega. Luis Miguel se paró a ver cómo iba el cupo de ese bus para saber si empezaba a llenar su carro y se percató de la situación.
“Se subieron 16 personas delante de ellos y ninguno les dijo ‘venga les colaboro’. Uno debe colaborar porque el día de mañana uno no sabe que esté en el puesto de ellos”, expresó con cierto tono de indignación.
Además, Luis Miguel comentó que su compañero busero no se había percatado de la situación porque estaba haciéndose la prueba de alcoholemia correspondiente.
Luis Miguel Londoño Montoya. /FOTO: CORTESÍALos hechos ocurrieron al mediodía del pasado sábado, 20 de agosto, en la Terminal del Norte y es más destacable el buen gesto de este busero, porque sus jornadas de trabajo son agotadoras, de 14 horas.
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Pero Luis Miguel es todo un bacán y hasta bromeó con el tema cuando le dijimos que es un fortachón: “Claro, hay que tomarnos toda la sopita”.
Adicional, sacó pecho porque las personas que ayudó estaban pesaditas: “Creo que eran personas del Ejército, porque eran hombres muy grandes y fuertes”, concluyó este inspirador busero.
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