Familiares y amigos de Stefanía Barranco, la mujer asesinada en un centro comercial de Bogotá, esperan por justicia.
Familiares y amigos de Stefanía Barranco, la mujer asesinada en un centro comercial de Bogotá, cuyo crimen es atribuido a su expareja sentimental, siguen llorando su partida y no dejan de clamar justicia, luego de que la sepultaran en el municipio de Malambo, Atlántico, donde tanto ella como Iván de La Rosa, el sujeto señalado de acabar con su vida, nacieron y residieron por varios años.
Jhosimar Gutiérrez, primo de la víctima, dijo: «Que se haga justicia y que ojalá pague esa persona lo que tenga que pagar. Ella era una joven de 31 años, alegre, trabajadora, dedicada a sus hijos y bueno, ya nos quedan solo los recuerdos».
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Una de las vecinas de Stefanía en Malambo afirmó que no supera su muerte, ya que la conoció desde cuando ella tenía tres años y ahora solo le quedan los recuerdos.
«Ella paraba con los abuelitos y ella también ahí en la casa. Ella era una niña muy querida, una persona que se dejaba querer mucho, ella era muy dada, muy sociable con todos. Sinceramente, nosotros estamos consternados porque no pensamos que el compañero de Estefany fuera a llegar a lo que llegó con ella», contó la mujer.
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Barranco fue asesinada en un almacén de electrodomésticos en la capital del país, presuntamente, a mano de su expareja, de quien días antes se había separado. Sin embargo, su familia asegura que pese al distanciamiento la continuaba acosando.
«Él como que llegaba a acosarla al trabajo, donde vivía como que la esperaba y ella estaba decidida a no seguir más con él», expresó su primo.
Ellos mantuvieron la relación por 10 años y fruto de la unión tuvieron dos hijos que actualmente tienen nueve y seis años, los cuales están bajo la custodia de sus abuelos maternos.