El perro fue atropellado cuando cruzaba la carrera 50 corriendo desesperado, después de una discusión entre un conductor que grabó al animal llorando y el taxista que lo atropelló, se conoció que el animal no fue socorrido a tiempo.
Noticias Cali.
En medio de las caravanas de hinchas del Cali y del estruendo de la pólvora en casi toda la ciudad, se conoció del caso de un perro atropellado en plena carrera 50, hubo una discusión entre conductores mientras el perro se arrastraba adolorido y lastimado de su cadera y patas traseras.
Era Lukas, un perro que tenía casa y que huyó denuncian, por la pólvora.
«Esto es a causa de no solo una familia que no lo cuidó lo suficiente en una fecha del mes tan difícil, de un taxista indolente que no lo auxilio y se fue de esa manera, sino a causa de la falta de empatía e inconsciencia con la pólvora«, denunció el animalista y rescatista Jairo Marin Anaya.
Lukas fue atropellado en la carrera 50 con 43 Mariano Ramos, cerca a su casa, en ese barrio vivía. Su dueña, apenas salió corriendo, puso la foto y publicó en Facebook.
La discusión
Un vídeo muestra como el taxista señalado de atropellar al animal, está en medio de la calle y discute con un conductor, «pero a dónde lo llevo, no sé a dónde llevarlo».
Lukas mientras, llora del dolor, se arrastra.
«El hombre acaba de atropella al animalito y lo va a dejar botado», le reclama el conductor.
Los hombres discuten porque el conductor le dice que lo lleve a una veterinaria en Santa Elena, y el taxista responde que no sabe dónde hay una.
No está claro finalmente quién recogió al perro y lo trasladó a Santa Elena. Cuando un agente de tránsito se acercó hasta la zona para auxiliarlo, ya no estaba en el sitio y la gente no daba razón. Luego lo ubicaron en la veterinaria.
La dueña del animal cuando vio la publicación en Facebook, fue hasta Santa Elena y finalmente lo encontró, ya eutanasiado.
El primer reporte indica tenía daño interno en su estómago y otros órganos, en su cadera y partidas sus dos patas traseras.
«Al final el que perdió la vida y pasó minutos de dolor y angustia fue ese ser sintiente que en la calle es un niño eterno más», lamentó Marin Anaya.