Hoy en día, es considerado uno de los pueblos más pacíficos de Colombia y resalta por su majestuosidad y belleza natural.
Noticias Colombia.
Escondido entre las verdes montañas de Cundinamarca, a unos 120 kilómetros de Bogotá, se encuentra el fascinante municipio de Gama. Con una población de más de 4.000 personas en su área rural y urbana, este pequeño rincón de Colombia no solo destaca por su belleza natural y la amabilidad de sus habitantes, sino también por ser considerado el municipio más pacífico del departamento de Cundinamarca.
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Gama, además de su serenidad y esplendor paisajístico, posee una historia única que lo distingue. En un video del creador de contenido Kevin Bolaños, un habitante local compartió un valioso fragmento de la historia del municipio: Gama fue una república independiente de Colombia. Este episodio histórico se remonta a 1934, cuando la falta de inversión y recursos por parte del gobierno nacional llevó a los habitantes a tomar una medida drástica para asegurar el desarrollo de su comunidad.
«En este pequeño librito reposa una gran historia de nuestro municipio de Gama, la monografía. En la monografía se detalla que nuestro municipio fue una república independiente de Colombia y se debió a que el gobierno de ese entonces prohibió los mandos que ejecutaban obras dentro del municipio, que eran una obligación. Sin embargo, el gobierno los prohibió por circunstancias que él vio convenientes. Así, nuestro municipio, que no captaba recursos de la nación y no tenía sus propios recursos tampoco, quedó en ceros… y se decidió crear una república independiente», detalló.
Comunidad eligió a sus gobernantes
Catolisismo, Unión, Patriotismo (CUP) era el nombre de dicha república. Los habitantes eligieron a su propio presidente, vicepresidente, y establecieron diversos ministerios, congreso y gobernadores para gestionar su nuevo estado.
De acuerdo con el relato del habitante de Gama, cada persona debía aportar cierta cantidad de dinero para llevar a cabo las obras en su territorio. La comunidad se unió para construir escuelas, colegios, caminos y otras obras públicas esenciales.
Sin embargo, el gobierno departamental no vio con buenos ojos esta forma de organización y trasladó a quien era el líder del proceso, el padre García Araos. A pesar de su breve duración, el legado de esta experiencia sigue vivo en la memoria de la población, quienes recuerdan esta etapa como un tiempo de progreso y cohesión en la historia de su querido municipio.
Hoy en día, Gama continúa siendo un lugar tranquilo y apacible, donde la historia de su breve independencia sigue siendo un orgulloso recordatorio del espíritu independiente y la unidad de su gente.
Aquí el video reportaje de Kevin Bolaños:
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