El gobernador de Nariño, en su defensa de la comunidad tumaqueña, critica un video publicado en un medio de comunicación donde la analista, según el mandatario, revictimiza a los habitantes de Tumaco y exige que no se utilice al municipio para atacar al Gobierno Nacional.
El gobernador de Nariño ha alzado la voz en defensa de la población de Tumaco tras la difusión de un video en el que la analista Salud Hernández formula críticas hacia el mensaje del Presidente Gustavo Petro en la ONU. En su declaración, el gobernador denuncia lo que considera una ofensa, estigmatización y revictimización de los tumaqueños, afirmando que el comentario de Hernández refleja una falta de comprensión profunda sobre la realidad social de la región.
El video, que ha sido objeto de controversia, muestra a Hernández atacando la postura del Presidente sobre temas cruciales como la paz, el cambio climático y la desigualdad social. Según el gobernador, la analista emplea un enfoque que simplifica la complejidad de la situación en Tumaco, utilizando ejemplos que, en su opinión, no hacen justicia a la historia y lo que enfrenta la comunidad.
“En su intento por criticar, falta a la verdad y estigmatiza a Tumaco y su gente”, expresó el gobernador. Además, enfatizó que la visión limitada de Hernández sobre las zonas deprimidas ignora los contextos históricos y sociales que han dado forma a la región, lo que dificulta una discusión constructiva sobre los problemas que afectan a la población.
El gobernador subrayó que las críticas deben ser fundamentadas y empáticas, especialmente cuando se trata de comunidades que han enfrentado desigualdades históricas. “No podemos permitir que el discurso de algunos ignoren las luchas y logros de quienes hemos nacido, vivido y sobresalido en entornos complejos”, afirmó.
La reacción del gobernador busca defender a los tumaqueños, sino también generar un llamado a la responsabilidad en la forma en que se representan las realidades locales en los medios de comunicación.
En un cierre contundente, el gobernador expresó: “La cabeza no se hizo para el sombrero». Apuntando a la necesidad de abordar con seriedad y respeto las realidades de Tumaco, refuerza su postura de que el diálogo debe estar basado en hechos y en la consideración de la dignidad de todos los ciudadanos.