El Coronel John Edward Guerra Manso, Comandante de la Vigésima Tercera Brigada del Ejército Nacional, informó sobre el levantamiento del cuerpo del personero Jimmy Rosero en una zona rural de Cumbitara, Nariño. Tras intensas labores de verificación y destrucción de artefactos explosivos, el cuerpo fue trasladado de manera segura a una zona protegida.
El Comandante de la Vigésima Tercera Brigada del Ejército Nacional, Coronel John Edward Guerra Manso, emitió un pronunciamiento oficial sobre los hechos ocurridos durante el procedimiento de levantamiento del cuerpo del personero Jimmy Rosero, llevado a cabo por las tropas en conjunto con las autoridades judiciales en una zona rural de Cumbitara, en el departamento de Nariño.
En su declaración, el Coronel Guerra detalló que las operaciones se desarrollaron con el apoyo de los equipos especializados en la verificación y destrucción de artefactos explosivos, lo que permitió garantizar la seguridad tanto del personal involucrado en el procedimiento como de la comunidad en la región.
«Es de destacar que, después de intensas labores de verificación, el cuerpo del señor personero fue trasladado de manera segura a una zona segura, en un proceso que fue llevado a cabo con total respeto a los protocolos establecidos y bajo estrictas medidas de seguridad», explicó el oficial.
El levantamiento del cuerpo, realizado en un área de difícil acceso en zona rural del corregimiento El Ejido y con alto riesgo de presencia de artefactos explosivos, se llevó a cabo con la máxima prudencia para evitar cualquier incidente que pudiera poner en peligro a las autoridades y los habitantes de la zona.
El Coronel Guerra también expresó el compromiso del Ejército Nacional con la seguridad y el orden en las regiones del país, reiterando que las Fuerzas Armadas seguirán trabajando de manera coordinada con otras entidades para garantizar la tranquilidad y el bienestar de la población.
Este pronunciamiento surge en medio de las investigaciones relacionadas con el fallecimiento del personero, que fue secuestrado y posteriormente asesinado en el sector.
Ejército Nacional repugnó y denuncia el actuar criminal de las estructuras residuales Franco Benavides y Uribe Rondon, quienes serían los autores del hecho en el que él personero perdió la vida.
Además de la instalación de minas antipersonales cerca al cuerpo para impedir el proceso de levantamiento, habrían usado más de 10 mil granadas lanzadas desde drones a la población del Ejido.