La visita de perros a pacientes se podrá llevar a cabo bajo ciertas condiciones en la Unidad de Cuidados Intensivos de Hospital de Pasto.
La Fundación Hospital San Pedro ha realizado una exitosa prueba piloto para la aplicación del ‘Protocolo de visita de familiar canino a la Unidad de Cuidados Intensivos e Intermedios adulto’. Esta prueba se llevó a cabo con ‘Bruno’, un canino de 5 años, quien se llevo por los familiares de un paciente hospitalizado en dicha unidad.
El protocolo, que describe los pasos y condiciones necesarios para adelantar este tipo de intervenciones asistidas con animales, está respaldado por estudios médicos a nivel mundial sobre los beneficios terapéuticos que reciben los pacientes en los ámbitos psicológico, fisiológico y social.
La nueva UCI del Hospital San Pedro se diseñó como una unidad de puertas abiertas, para que los pacientes puedan sentirse seguros y acompañados por sus familias, incluyendo a sus mascotas. Esto motivó la consolidación de un protocolo que permite a los pacientes recibir la visita de sus perros, buscando beneficios para su recuperación.
El desarrollo de este protocolo se lidero por Ángela Patricia Malte Termal, fisioterapeuta de la unidad, quien realizó una exhaustiva revisión bibliográfica y de estudios que sirvieron como base para la creación del protocolo. Estudios fundamentales para desarrollar y respaldar las prácticas descritas.
El protocolo también se revisó y aprobó por el Comité de Infecciones Intrahospitalarias y el Equipo de Seguridad del Paciente de la institución.
Por el momento, la decisión es que las visitas se realicen únicamente con perros, ya que estas mascotas socializan mejor con los seres humanos y se adaptan más fácilmente a diferentes ambientes en comparación con otras mascotas. Las principales indicaciones para realizar la visita canina, definidas en el protocolo, son:
Pacientes con más de siete días de hospitalización en la UCI, que no tengan ningún tipo de aislamiento y cumplan con ciertas condiciones clínicas.
El canino debe tener carné de vacunas, estar desparasitado, libre de pulgas y contar con un certificado de un veterinario que asegure que el animal no tiene problemas de piel, cáncer o que no está inmunosuprimido.
Solo se permitirá la visita de un perro por día, con una duración de 30 a 40 minutos. Todas las visitas se realizarán bajo estrictas normas de bioseguridad, incluyendo los cinco momentos del lavado de manos y la limpieza de patas del canino.
A partir de esta prueba piloto y de acuerdo con los hallazgos obtenidos, el protocolo podrá ajustarse y se dará a conocer oficialmente a los familiares de los pacientes en la sala de espera de la UCI. De ser posible, el protocolo se extenderá a otros servicios del hospital.
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