Jorge, el barranquillero que llegó a Pasto para enamorar con las artesanías de vidrio que vende en las calles

Trabaja con el vidrio que mucha gente desecha, “es solo amar lo que estás haciendo, querer lo que haces y a que te dedicas”. Esta es su historia.

Noticias Pasto

En la calle 18 de la ciudad de Pasto, en un semáforo central se ubica Jorge Enrique Cerón, un barranquillero que hace dos días llego a la ciudad para enamorar con su arte a través plasmado en vidrio.

Las personas que transitan por dicho sector no pueden evitar admirar las piezas elaboradas en vidrio. Incluso vehículos deciden parar y mirar por unos minutos como elabora dichas piezas de vidrio.

Las manos de Jorge tienen talento, y notablemente en cuestión de unos minutos puede realizar piezas como servilleteros, floreros y portarretratos.

al medio TuBarco Noticias Pasto decidió conocer un poco más de la historia de vida de Jorge. Con una sonrisa nos contó más sobre su trabajo.

“Soy artesano del vitral o del arte del vidrio, esto se trata mas o menos de reciclar el vidrio que la gente desecha, dijo Cerón.

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El amor por lo que hace, lo refleja en cada obra de vidrio, en donde el proceso manual lo hace más valioso.

Proceso y herramientas

Con metro, corta vidrios, lija, y un eje, inicia su jornada laborar. Jorge extiende un mantel improvisando una mesa de trabajo en la calle.

“El proceso es manual. Primeramente con un pequeño eje doblado, que es la herramienta principal que talla el vidrio, lo segundo un corta vidrios económico, para trabajar la talla y el resto es la creatividad de la persona”, expresa.

Los productos que ofrece a la ciudadanía en Pasto son variados. Desde servilleteros hasta la elaboración de peceras y atriles.

Las ganas de trabajar de Jorge se reflejan en su disciplina, sin importar el sol o la lluvia, sale a ofrecer sus productos.

“Los precios varían desde 4 mil, 5 mil hasta 12 mil, dependiendo el tamaño del artículo”, dice.

Una casualidad del destino

Cuenta que este arte lo aprendió de un colega que también trabajaba en las calles de Bogotá. Confiesa que es un viajero amante por recorrer los lugares y culturas del mundo, donde por “casualidad del destino” se convirtió en artista del vidrio.

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“Me encontré un caballero que tenía este arte, me gustó y a él le gustó mi trabajo porque yo era escultor del material reciclable e hicimos un intercambio. Yo le enseñe a esculpir lo que es la basura, y él me enseño el arte del vidrio”, dijo Jorge.

Millonarias obras en vidrio

En dicho arte, Jorge lleva trabajando 28 años, donde ha adquirido varias anécdotas y experiencias.

Inclusive, cuuenta que ha sido el autor de piezas que logró vender por sumas millonarias en la capital de Colombia .

“Yo trabajé 12 años en el reciclaje y me dejó muy satisfecho; hice una obra de Bob Marilyn el cual fue adquirido por el hijo del presidente Álvaro Uribe. Me lo compró por 4 millones de pesos en Bogotá”, cuenta.

Pero así mismo reconoce que sus obras las prefiere vender a las personas que sepan valorar y admirar el arte.

“Tuve una obra muy bonita, y pasó una señora que se le notaba el amor y me dijo que no tenía lo que debe valer mi obra. Le pregunté que cuanto tenía, me dijo que 4 mil pesos y se la vendí”

Jorge les envía un mensaje a los ciudadanos para valorar y apoyar el arte callejero, el cual “está muy abandonado”

“Hay artistas en la calle que son muy poco apoyados por la gente. Yo les agradecería que a esa gente la apoyaran; es nuestra cultura y no queremos que se pierda. Están apoyando arte, no están apoyando malos vicios”, finaliza Jorge.

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