lunes, noviembre 18, 2024

Gallinazos destaparon las bolsas para sacar los restos de carne y huesos afuera de la plaza de mercado en Popayán

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En las afueras de la plaza de mercado La Esmeralda en Popayán tiraron unos cráneos animales y se desató una polémica en la ciudad.

Noticias Popayán.

En los alrededores de la plaza de mercado La Esmeralda en Popayán, un hombre grabó varios gallinazos comiéndose unas cráneos animales, el transeúnte dijo que se trataba de caballos, sin embargo, se trató fue de restos que no depositaron debidamente.

El hombre que grabó la presencia de las aves carroñeras, dijo que esos eran resto de carne de caballo que se comían los habitantes de Popayán.

Denunció que en esa plaza de mercado, “están comercializando carne de equino”.

Sin embargo, no se acercó hasta la plaza para denunciar lo que ocurría ni alertó a policía ni ninguna otra autoridad de la presencia de los restos regados ya por la calle ni de los gallinazos.

Los vendedores y directivos de la plaza salieron a desmentir las afirmaciones realizadas por el ciudadano.

“Restos de carne de res”

Una vez se hizo viral el vídeo, desde el mercado también a través de un vídeo, explicaron la situación; en la grabación aseguraron que se trata de cráneos de vacas sin espina.

Al parecer, el encargado de botar los cráneos de las vacas las dejó en el separador vial porque el vehículo recolector no había pasado.

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Los cráneos llamaron la atención de los gallinazos que llegaron hasta el lugar y esto llamo la atención de los transeúntes y visitantes de la plaza.

Sobre las acusaciones de la presunta venta de carne de caballo en el lugar, en el video aseguraron que son especulaciones que perjudican a la plaza y a los vendedores de carne.

Hasta ahora señalan, no se habían recibidos quejas o denuncias por mal estado de la carne, o su dureza ni tampoco de otras prácticas irregulares para vender que no es la ofertada.

Sin embargo, el hecho de que esos restos se hayan depositado en la calle de esa manera llama la atención.

Este tipo de prácticas ya han generado problemas con restaurantes y carnicerías en otras ciudades del país. Las bolsas y restos terminan podridos en las vías, regados por perros y habitantes de calle en busca de comida.

Esta fue la denuncia inicial:



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