Preocupada se encuentra la comunidad del barrio Salazar Mejía, ubicado en la Comuna Ocho de la ciudad de Pasto, debido a que pese a llevar más de 40 años de fundación aún las autoridades locales no han legalizado este sector, el cual cuenta con todos los requisitos para ello.
La presidenta de la Junta de Acción Comunal, JAC, Aura Marina Coral, manifestó que pese a las múltiples solicitudes enviadas a las diferentes administraciones locales de Pasto aún no han atendido su petición y el barrio no ha sido reconocido por las autoridades.
Indicó que el nombre del barrio, Salazar Mejía, se lo pusieron en honor a un obispo, el cual colaboró con la comunidad de este sector del occidente de la capital nariñense con la fundación y la conformación de una Junta de Acción Comunal para gestionar diferentes proyectos.
Habitantes de este barrio solicitaron a la Administración municipal atender la solicitud de los dirigentes y legalizar este barrio con el fin de recibir beneficios y participar en los diferentes proyectos que el Gobierno Nacional otorga a los sectores organizados y establecidos ante la ley.
Por otra parte, la dirigente manifestó que una de las principales problemáticas en este sector de la Comuna Ocho de Pasto es la inseguridad, debido a que varios jóvenes consumen sustancias psicoactivas, especialmente en barrios aledaños, por lo que solicitó el apoyo de la Policía Metropolitana.
Dijo que ni siquiera los recibos de los servicios públicos llegan con el nombre del barrio, por lo que algunas facturas llegan con el nombre de Mariluz y otros con el de Jorge Giraldo. Exigieron la aclaración inmediatamente y la legalización de este sector lo más pronto posible.