Pese a agotar todos los esfuerzos para evitar la construcción en sus territorios, indígenas de la comunidad Wayuu iniciaron una huelga de hambre.
Noticias Caribe.
El pasado 21 de diciembre, miembros de la comunidad Indígena La Celbita, territorio Wayuu, iniciaron una huelga de hambre para protestar las presuntas vulneraciones a sus derechos.
Esto se debe a la construcción de la nueva cárcel de Riohacha, que denuncian, ha generado desplazamientos forzados de sus territorios ancestrales.
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Tras haber agotado todos los esfuerzos en instancias administrativas y judiciales de reclamación, dos mujeres y un anciano, se sometieron a este mecanismo de protesta.
Piden ser escuchados y que se reivindiquen sus derechos fundamentales.
“Es pertinente indicar que las mujeres y ancianos que en nombre y representación de su comunidad indígena deciden declararse en huelga de hambre, están dispuestos a llegar hasta las últimas instancias y si es posible, ofrendar sus vidas por el respeto y reivindicación de sus derechos”, aseguraron.
Hasta el momento, llevan más de 129 horas sin probar comida a modo de protesta.
Según reveló José Silva Duarte, líder de la ONG Nación Wayuu a El Heraldo, la salud de los manifestantes se ha venido deteriorando con el paso del tiempo.
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Además, agregó que «ni la alcaldía, ni el ministerio del Interior se han pronunciado, ni acercado a dialogar con ellos».
#Alerta 144 horas completan encandelados y en huelga de hambre miembros de la comunidad la Ceibita Macedonia sin que reciban acompañamiento ni atención por parte de @SecSaludBAQ ni otra entidad. @katiaospino @RevistaSemana @Kelia23 @SGuerreroB @ajaware1 @Baena pic.twitter.com/RBMJMoKd1i
— ONG Nacion Wayuu (@OngWayuu) December 26, 2021
La nueva cárcel
Los manifestantes se encuentran amarrados en la zona donde se está construyendo la nueva cárcel de Riohacha.
La nueva cárcel tendrá una inversión de $ $181.957.017.859. Será de mediana seguridad,
Contará una capacidad para cerca de 1.500 personas privadas de la libertad, entre ellos hombres y mujeres, gracias a la constitución de pabellones especiales con enfoque diferencial.
En el mes de octubre, el Ministerio del Interior visitó la zona.
Luego de una inspección de la Subdirección Técnica de la Dirección de la Autoridad Nacional de Consulta, determinó que, en este caso, no procede la consulta previa.
Ahí se estableció que el desarrollo de los usos y costumbres, los medios de subsistencia y dinámicas económicas, prácticas de cultivos y cementerios se encuentran fuera del área de intervención del proyecto.
Por esta razón, no se verían afectados y no impediría las prácticas y rituales desarrollados en dichos lugares.
Adicionalmente, el ministerio aseguró que estas comunidades cuentan con vías carreteables, caminos que permiten el libre tránsito de los miembros de las comunidades.
Aseguraron que no afectarían la realización de sus prácticas cotidianas y de subsistencia.