La Alcaldía de Pasto, en cumplimiento de una orden judicial, realizó el cerramiento con vallas de los parques Santiago y Rumipamba, regulando la venta de hervidos en estos lugares. Sin embargo, los vendedores informales se han reubicado en otros puntos cercanos.
La Alcaldía de Pasto llevó a cabo este lunes el cerramiento de los parques Santiago y Rumipamba con vallas metálicas, para regular la seguridad en estos espacios públicos. La medida afecta principalmente a los vendedores informales, quienes, a partir de ahora, ya no podrán seguir vendiendo hervidos dentro de estos parques.
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Por otro lado, el alcalde señaló que en una reunión con vendedores ambulantes, se contemplaron acuerdos que incluyen un horario límite de venta de bebidas artesanales hasta las 11:00 p.m. y la reducción total de ruido para evitar malestar entre los residentes.
Sin embargo, la decisión no ha puesto fin a la venta de hervidos hasta el horario establecidos en la ciudad. Algunos vendedores informales han optado por reubicarse en otras zonas cercanas.
Un ejemplo claro de esto es la nueva ubicación de los comerciantes en la intersección de la calle 29 con carrera 17, donde han instalado sus puestos, algunos con parlantes y otros elementos, para continuar ofreciendo su producto durante la noche.
A pesar de la regulación de venta dentro de los parques, la venta de hervidos sigue siendo una práctica popular en Pasto, especialmente durante las noches, cuando algunos vendedores operan después de las 11:00 p.m.
La medida adoptada por la alcaldía busca recuperar el orden en los espacios públicos y garantizar la seguridad y el bienestar de los ciudadanos, aunque aún se desconoce si las autoridades tomarán nuevas acciones para regular las nuevas ubicaciones de los vendedores informales.