A pesar de las lluvias, la CAR dio un dato desalentador con los embalses.
Bogotá enfrenta una compleja situación climática debido a las fuertes lluvias de las últimas semanas, que han provocado inundaciones y encharcamientos en vías principales, afectando especialmente la movilidad en la Autopista Norte.
Aunque el incremento en las precipitaciones es notable, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM) aclaró que no están relacionadas con el fenómeno de La Niña.
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¿Hasta cuándo lloverá en Bogotá?
Según Luis Alfonso López Álvarez, jefe encargado de la Oficina del Servicio de Pronósticos y Alertas del IDEAM, se espera que las lluvias continúen afectando a la ciudad hasta finales de noviembre o mediados de diciembre. López explicó que las precipitaciones más intensas ocurrirán en las tardes y golpearán principalmente al norte de Bogotá, mientras que en otras áreas las lluvias serán menos frecuentes e intermitentes.
Situación de los embalses: sigue el racionamiento
Aunque las lluvias han generado esperanzas sobre la recuperación de los embalses, la situación no ha mejorado significativamente. Según la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), el embalse de Chingaza tuvo un aumento de apenas 1,46 puntos porcentuales en su capacidad, mientras que Neusa y Tominé también registraron incrementos moderados. Por otro lado, los embalses de Chisacá y Regadera, ubicados al sur de la ciudad, no presentaron variaciones notables en su capacidad, lo que mantiene la alerta sobre la disponibilidad de recursos hídricos.
El clima lluvioso, además de agudizar los problemas de movilidad en una ciudad ya congestionada, ha contribuido a la propagación de enfermedades respiratorias, lo que preocupa a los bogotanos y a las autoridades sanitarias.
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Lluvias no se detienen: principales localidades afectadas
Bogotá ha enfrentado fuertes lluvias en las últimas semanas, causando estragos en varias localidades de la ciudad. Las precipitaciones intensas han provocado inundaciones en barrios, colapsado vías principales y generado problemas de movilidad. Sectores como Suba, Kennedy y Engativá han sido de los más afectados, con desbordamientos de canales y problemas en el drenaje que agravan la situación. Las autoridades han activado planes de emergencia y recomiendan a la población tomar precauciones para evitar accidentes y proteger sus viviendas. La persistencia de las lluvias plantea desafíos en la respuesta de emergencia y la prevención de nuevos incidentes.