Sebastián Roa habría muerto el pasado 7 de enero, en medio de una riña dentro de una celda en la estación de Policía de Rafael Uribe Uribe.
Un joven de 25 años, identificado como Sebastián Roa, murió el pasado 7 de enero dentro de una celda de la estación de Policía de Rafael Uribe Uribe, al parecer, en medio de una riña. Su familia ha pedido a las autoridades dar una respuesta concreta frente a su muerte.
La hermana del joven, Laura Roa, indicó que no hay claridad frente al fallecimiento de Sebastián, quien se encontraba recluido en la estación por el delito de hurto calificado desde hace un mes.
«Exigimos que la muerte de Sebastián no quede en la impunidad. A mi hermano lo asesinaron en la estación de Rafael Uribe Uribe; no nos quieren contar la verdad«, dijo Laura Roa.
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Además de esto, mencionó que no se les notificó sobre la muerte de manera inmediata y que existen varias versiones por parte de la Policía y la Fiscalía sobre la hora del deceso.
«Nos han dicho que Sebastián murió a las 6 de la tarde pero luego sale que el CTI lo supo a las 10:30 de la noche y a nosotros nos notificaron a la una de la mañana que debíamos ir a la Fiscalía a preguntar por él«, recalcó Roa.
Este caso se suma al asesinato hace algunos meses de Juan Pablo González, presunto abusador de una menor en Transmilenio, quien murió dentro de la celda de una Unidad de Reacción Inmediata (URI) con la complicidad -al parecer- de varios policías que lo custodiaban.
La Policía Metropolitana de Bogotá informó que el cuerpo fue encontrado en la celda a las 9:30 de la noche el pasado sábado, por lo que se inició la investigación para aclarar el hecho.
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«Al interior de una celda se presenta una riña que, al parecer, causa el deceso de una persona privada de la libertar que se encontraba condenada a 24 meses de prisión. El cuerpo técnico de investigación asume el caso para determinar las circunstancias de tiempo, modo y lugar», señaló el coronel Eiver Alonso, subcomandante (e) de la Policía de Bogotá.
Por el momento, la familia pide que se aclare el caso ya que el joven estaba pagando por sus actos y deseaba volver a la libertad.