El 25 de junio del 2011, la Unesco reunió a 51 municipios y 858 veredas de Risaralda, Quindío, Caldas y Valle del Cauca con el título de Paisaje Cultural Cafetero, debido a las sobresalientes dinámicas económicas, ambientales y culturales que involucran a los habitantes de esta zona del territorio colombiano.
Esta declaratoria como patrimonio de la humanidad ha generado enormes beneficios para la región en materia turística y apertura al mundo, permitiendo un avance muy significativo para quienes la habitan.
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Sin duda, los caficultores son parte de los protagonistas principales y, según explicó Luis Miguel Ramírez, representante de Risaralda ante el comité directivo de Fedecafé, las 20 mil familias de este departamento que se dedican a cultivar y cosechar el grano vienen apostándole, en conjunto con las autoridades, a lograr que la declaratoria siga vigente.
Es necesario señalar que esta declaratoria también compromete al Estado colombiano y a los entes locales y departamentales a trabajar en pro de la región para lograr su conservación en el tiempo.