Aunque hay denuncias que apuntan a que el asesinato de Lucas Villa, al parecer, habría sido el resultado de una operación ilegal conjunta entre algunos miembros de la Sijín y el grupo organizado Cordillera, las autoridades no han hecho más que rechazar esa versión y no han entregado resultados en este caso.
Eisenhower Zapata, abogado defensor de derechos humanos, señaló que todo el país está esperando la Fiscalía esclarezca este hecho de sangre que tuvo lugar el pasado 5 de mayo en el Viaducto César Gaviria Trujillo; además, indicó que están adelantando gestiones con organismos internacionales para lograr asilo político para quien sería el testigo clave que estaría dispuesto a contar la verdad.
«Nosotros hemos estado oficialmente intentando hacer los contactos para que, a través de organismos de derechos humanos en el exterior, se pueda brindar el apoyo a esta persona que presuntamente nos ha dicho qué fue lo pasó pero si no hay una respuesta efectiva de organismos internacionales, pues es difícil que él pueda ir y contar la verdad como la queremos conocer. Ya pasó otro mes y no han ocurrido mayores cosas», señaló Zapata en diálogo con Caracol Radio.
Por lo pronto, el caso de Lucas Villa es uno de los tantos que está sin resolver en el país y que ha tomado mayor relevancia por las presuntas irregularidades que ha habido en el proceso de investigación.
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