Roberto firpo

Ayer y hoy al compás del Tango

Darío Tobón Montoya

Culminamos este recuento de los grandes iniciales impulsores del tango en la década de 1910. Hace pocas semanas tuvimos la semblanza del más grande Osvaldo Fresedo y más recientemente la de Vicente Greco. Hoy seguimos esta serie con Roberto Firpo. En cuanto a Francisco Canaro, el quinto final de ese grupo, hace muchos meses tuvimos la reseña de él y sus hermanos.

ROBERTO FIRPO (1884-1969). Pianista, director y compositor. Nació en Las Flores, provincia de Buenos Aires. Vivió su infancia en el barrio Corrales Viejos donde su padre montó almacén. Tuvo gracias a la solvencia de su padre estudios completos de primaria. En los primeros años de siglo lo hallamos en Buenos Aires, donde tuvo varios empleos: pintor, empleado, obrero en fábrica de calzado y en la famosa fundición Vasena, donde se reprimió a bala una huelga en la célebre semana trágica de 1919, con saldo de muchos muertos.

Allí trabajaba el compositor Bachicha, quien lo lleva a su maestro Bevilacqua, con quien tiene sus primeras clases musicales; se inicia con el violín y culmina con el piano, que alcanzó a dominar con singular destreza: en él tenía una base rítmica sólida, pero flexible y ágil, con acentuación en la melodía. Gracias a su inquietud renovadora, fue el primero de los músicos tangueros que introdujo en forma definitiva el piano al tango. Los primeros tangos, llamados “para piano” no tuvieron en sus compositores una continuada labor en ese instrumento y fue Firpo, en la década de 1910 el que le dio el definitivo ingreso al piano.

 Precisamente en 1913 se organiza un concurso para reemplazar en el cabaret Armenonville la orquesta que actuaba, la del “Tano” Genaro Expósito. Firpo, su pianista, fue el escogido. Ello contrarió a un musico de otro conjunto participante, que apuñaló levemente a Firpo. Allí impone el piano como conductor. En dicho cabaret estrena su mejor tango Alma de bohemio. Así Firpo abría la nueva tendencia orquestal del cabaret y le daba piso firma a la orquesta típica. En dicho cabaret, en el proceso de consolidación orquestal, le agregó un segundo violín, reingresó la flauta y agregó el contrabajo.

Roberto Firpo y su orquesta

En la evolución que siguió teniendo la orquesta de Firpo en los años 40, crea su famoso cuarteto, en el que siguió presentándose acompañado por su hijo del mismo nombre y pianista que contribuía con su actuación en las grabaciones a dos pianos que efectuaba su padre. El hijo no alcanzó la importancia paterna. Lo acompañó hasta 1960.

La labor de compositor de Firpo es extensa y de calidad, que se inicia precozmente en su vida. Inicialmente escribió La gaucha Manuela (al preguntarle a Firpo a quien se refería con ese nombre exclamó:Es una dama de la noche . Prosigue con La chola y El compinche en 1909. El conocido tango Argañaraz (nombre propio de un lugar) es escrito poco después. Otros tangos de la época del Armenonville son: De madrugada, Indiecita, Sentimiento criollo (no confundir con Sentimiento gaucho, de Canaro Pelai), El amanecer, El apronte, Fuegos artificiales escrito a dos manos con Arolas, El talento, que según Horacio Ferrer es de los más hermosos, Curda completa (borrachera total) y Didí.

Escribió unos curiosos tangos que llamó “Los tangos dialogados”. Fusionó su orquesta a la de Canaro para presentarse en los carnavales de Rosario. Desde allí se traslada a Montevideo para seguir su carrera musical. En esa ciudad, en 1917, un tímido estudiante de arquitectura, Gerardo Hernán Matos Rodríguez, le solicita a Firpo su ayuda para que sobre una marcha que él había escrito para los carnavales estudiantiles de esa capital, llamada La cumparsita, la transformara en un tango. Así lo hizo Firpo agregándole una parte de su tango La gaucha Manuela y otra del tango Curda completa. Entonces el tango La cumparsita queda con 4 partes, pues Matos solo le había escrito 2. Lo estrena la orquesta de Firpo en el café La Giralda (donde hoy está situado el palacio Salvo) el 19 de abril de 1917. Este hecho lleva a una conclusión: Matos Aportó 2 estrofas y Firpo otras 2 junto con el arreglo musical. Debiera aparecer en los créditos como el coautor, lo que nunca ha sucedido. ¿Por qué?

En otro hecho, marcador de la historia del tango, aparece Roberto Firpo: su orquesta acompaña a la actriz y cantante Manolita Poli en el estreno del tango Mi noche triste, de Castriota, Maroni y Pascual Contursi, con notorio éxito el día 26 de abril de 1918. El año anterior lo había grabado Gardel, en una circunstancia que fue poco conocida. Fue la Poli, primera actriz de la obra teatral “Los dientes del perro”, de Weisbach y José Gonzales Castillo, la que en rigor publicitó este tango.

En la década de 1920, mientras Fresedo y Greco siguen progresando musicalmente, Canaro y Firpo mantienen línea musical estática, no innovadora, después de todos los beneficios que recibió el tango de ellos en su actividad creadora en la década de 1910. Según Benedetti, “siguieron en estratos más conservadores. Evolucionaron dentro de los mismos parámetros. En el fondo, no tenían diferencias”. Para Selles, “Firpo es uno de los primeros que evolucionó el tango. Fue un adelantado”. ¿A cuál de los dos historiadores creemos?

Firpo debuta en 1907 en el salón La Marina de la esquina de Suárez y Necochea. A partir de 1920 no se interrumpe la función musical de Firpo. Continúan sus grabaciones. En los años 40 retorna al cuarteto de los años iniciales, con el cual reactiva su popularidad. Yo poseo tres discos de ese cuarteto, de los años 1936 y 1937, que tuvieron mucha aceptación. Su vida musical le produjo mucho dinero. En total estuvo 70 años con el tango hasta sus 85 años cuando muere.

Su orquesta logró, al igual que la de Canaro un manejo muy agradable y artístico de los valses.

En próximas crónicas continuaremos ofreciendo la vida de extraordinarias figuras de estos fecundos años de comienzos de siglo XX: Agustín Bardi, Juan “Pacho” Maglio y Eduardo Arolas.

Como ya se ha vuelto usual en este trabajo, a continuación se insertan los vínculos mediante los cuales podrá disfrutar de algunas obras escogidas del artista de hoy:

https://youtu.be/DdWH20LZz1Q:                           Alma de bohemio – Pedro Laurenz – Alberto Podestá:

https://youtu.be/-7-Oz1o0wo8                                El Amanecer – Carlos Di Sarli –

https://youtu.be/PwTjsUMQypU                             Argañaraz – Juan D’arienzo & Armando Laborde

https://youtu.be/TzOl_n5OE5Y                              Fuegos artificiales – Orquesta de  Edgardo Donato

https://youtu.be/OKqZjEcertE                                 El vals de los recuerdos – Roberto Firpo

https://youtu.be/ng6kUuoaXEs                              El aeroplano – Roberto Firpo y cuarteto

Armenia, enero 27 de 2023