A la edad de 81 años murió en Cali, Silvia Botero Uribe, quien fuera secretaria de los gobernadores del Quindío, desde el primero de ellos, Ancizar López López, hasta el segundo mandato de Mario Gómez Ramírez, comenzando la década de los años noventa.
Después del terremoto del 25 de enero de 1999, Silvia Botero trasladó su lugar de residencia a la ciudad de Cali, donde se quedó a vivir definitivamente. Allí, en la capital del Valle, murió este martes, luego de soportar las dolencias de un tumor cerebral.
Ingresó a la gobernación del Quindío siendo muy joven, como secretaria del gobernador Ancízar López López, en el año de 1967 y en reemplazo de la primera secretaria Amparo Blash. Desde entonces, siempre estuvo en ese cargo, siendo la confidente de la mayoría de los mandatarios que ha tenido el departamento.
Silvia Botero Uribe se mantuvo soltera, no tuvo hijos, y permaneció muy ligada a sus hermanos, que le sobreviven: Carlos, Gloria, Blanca Lucía e Inés.
Silvia Botero Uribe, tercera de izquierda a derecha, con sus hermanos: Carlos, Gloria, Blanca Lucía (Marina, una amiga), e Inés.
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