En Armenia, Quindío, la inestabilidad laboral continúa siendo una preocupación significativa para los habitantes, con muchas personas enfrentando dificultades para mantener empleos por más de seis meses. Esto ha obligado a un número creciente de trabajadores a depender de empleos temporales o por horas para generar ingresos, lo que convierte la supervivencia diaria en un reto constante.
De acuerdo con el informe más reciente del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), la tasa de desempleo en Armenia para el trimestre móvil de mayo a julio de 2024 se mantuvo en el 11,7%, ocupando la octava posición entre 23 ciudades evaluadas en el país. Esta cifra es idéntica a la registrada en el trimestre anterior, lo que indica un estancamiento en la lucha contra el desempleo en la ciudad. En contraste, el promedio nacional de desempleo fue del 10,2%.
“Las últimas cifras reflejan una situación compleja en el mercado laboral de Armenia, con avances en algunos sectores y retos persistentes en otros. los datos no ceden, se mantienen o aumentan las cifras,y aunque baja de posición, el porcentaje debería llegar a un dígito ¿qué nos puede decir? que las cosas no van por buen camino, ¿qué están haciendo los gobiernos? poco en mi opinión”, expresó a QUINDÍO NOTICIAS Carolina Torres, contadora pública.
La situación se torna aún más preocupante al analizar el desempleo juvenil en Armenia, que alcanzó el 18,4%, superando el promedio nacional de 17,2%, mientras que en Ibagué fue de 22,8%, en Manizales de 18,1%, y en Pereira de 17,0%. Estas cifras se comparan con un promedio nacional de desempleo juvenil del 17,2%.
Este grupo demográfico se enfrenta a barreras adicionales para encontrar empleo estable, lo que evidencia las dificultades en el mercado laboral local.
En cuanto a la informalidad, Armenia reportó un índice del 41,2%, por debajo del promedio nacional de 55,9%, pero aún así preocupante, ya que muchos trabajadores carecen de seguridad social y estabilidad laboral.
Los indicadores del mercado laboral en la RAP Eje Cafetero muestran que Armenia experimentó una disminución del 1,6% en la tasa de desempleo y un aumento del 1,8% en la tasa de ocupación. Esto se traduce en un incremento de 6.534 personas ocupadas, una reducción de 1.932 personas desocupadas y una disminución de 1.034 personas en la población por fuera de la fuerza de trabajo.
En términos de ocupación por rama económica, Armenia registró aumentos significativos en varios sectores: 4.725 personas más en comercio, 2.220 en actividades artísticas, 1.987 en alojamientos, 1.585 en administración pública y 1.469 en la industria manufacturera. Sin embargo, las mayores disminuciones se observaron en actividades profesionales, con 2.765 personas menos, y en el sector de la construcción, que perdió 2.877 empleos.
En Armenia se registró un aumento de 14.518 empleados en el sector privado. Sin embargo, hubo reducciones significativas en los trabajadores por cuenta propia, con una disminución de 7.148 personas, y en los empleados del gobierno, con una reducción de 1.697.
Según el informe del Observatorio Económico de la Secretaría de Hacienda de Armenia, la ciudad fue la que más redujo su tasa de desempleo a nivel nacional. Se observó un aumento en el número de personas ocupadas, una disminución en los desocupados y un incremento en los inactivos. Durante este periodo, sectores como el comercio y los alojamientos impulsaron la creación de empleo, gracias a la temporada, aunque la construcción continuó en contracción. A pesar de estos avances, Armenia se ubica en la octava posición entre las 23 ciudades con mayor desempleo en el país.
Carolina, al referirse a las cifras, destacó que, aunque el desempleo ha mejorado en comparación con el año anterior, sigue siendo un desafío considerable. “Los resultados recientes demuestran que estar dentro de las 10 ciudades con mayor desempleo a nivel nacional es preocupante, y el hecho de que el valor sea el mismo que en el trimestre anterior de este año podría indicar un estancamiento”, expresó.