Ayer y hoy al compás del tango
Por Darío Tobón Montoya
LOS HERMANOS CANARO
En el año de 1925, en cumplimiento de un contrato, llegan a París Francisco Canaro, sus hermanos Juan y Rafael y numerosa comitiva, integrada por sus músicos y algunos acompañantes como fue el caso de Teresa Asprella, ya mencionado. Francisco debuta con su orquesta en el famosísimo cabaret Florida. Sus músicos visten disfrazados de gauchos, en supuesto “Traje Típico Argentino”. No sabían que los gauchos nunca tuvieron al tango como su música.
Allí en francés, llama a su orquesta con el pomposo nombre de “Canaro y su sinfonía y atracción Canaro´s”. Al seguir Francisco en su correría hacia New York deja a sus hermanos Juan y Rafael, cada uno con su respectiva orquesta. Cuando Juan decide en 1931 devolverse a la Argentina, Rafael siguió en la conducción de la orquesta, a la que perteneció el pianista Fioravanti di Cicco, hermano de Minotto (“Manobrava”). Carlos Dante cantó en ella. En especiales circunstancias también cantaron Luis Mariano y la actriz Carmen Sevilla.
El tango Canaro en París, lo escribió Caldarella precisamente en esa ciudad. Mucha gente y el mismo Pirincho creyeron que se había compuesto en su honor con motivo de su visita a la Ciudad Luz. Pero no fue así. Fue un hecho fortuito: Caldarella escribió un tango, sin hallarle título. Un día un amigo leía, a lo lejos, un periódico que tenía un titular del que solo reconoció la palabra inicial “Canaro” y las finales “en París”. Unidas esas palabras nació ese título.
Aquí, el sonado tango Canaro en París, en una gran versión del Sexteto Mayor del tango:
CARLOS GARDEL
De acuerdo con la biografía oficial, aceptada por los argentinos y rechazada por los uruguayos, era francés nacido en Toulousse. En el último viaje que hizo Carlitos a Francia, debuta en el cabaret Florida de París, el 2 de octubre de 1928, hecho que, según algunos escritos, marcó el ingreso del tango a Francia, lo que no es cierto, de acuerdo con lo informado antes. De todos modos, fue impresionante la acogida que tuvo, y allí se le abrió el camino al cine y al reconocimiento internacional.
ENRIQUE CADÍCAMO
En el año de 1930 inició su viaje y permanencia en París donde establece estrecha amistad y colaboración con los músicos argentinos. Con el bandoneonista, compositor y director Mario Melfi, escribe París Nocturno y Mis Amores. Con Manuel Pizarro escribió Que te vaya bien. El guitarrista y compositor Guillermo Barbieri, desde Niza le solicita que escriba la letra de un tango en el que se analice la temática de los argentinos varados en Europa. Así surge el tan aclamado tango Anclao en París. Cadícamo en esa ciudad escribió el libro “Debut de Gardel en París”.
Aquí podrá escuchar la versión de Anclao en París de Adriana Varela:
JULIO DE CARO
En el año de 1931, con los cantantes Luis Díaz y Carlos Marambio Catán llega a Francia. Recorre con su orquesta varias ciudades galas. En París alcanza resonante éxito. Hasta en la Universidad de la Sorbona es aclamado. Intervino en la musicalización y actuó en la primera película que filmó Gardel en Francia en 1931, “Las luces de Buenos Aires”.
OSVALDO FRESEDO
Arriba a París en 1928 con su cantante Ernesto Famá. Tras de sus actuaciones nocturnas, Famá se reunía con colegas músicos. Siempre llegaba Gardel con diferente acompañamiento femenino. Desde esa época ya corría el rumor de su supuesta homosexualidad. Estos hechos llevaron a que Famá expresara públicamente su famosa frase, que contaba lo que él veía cada amanecer: “¡Qué mujeres!, ¡Qué damas! ¡Así yo también hubiera querido se maricón”!
Osvaldo Fresedo
MARIO MELFI
Es tal vez el último tanguero argentino importante de la edad dorada del tango de 1920 a 1950, que llegó a París. Todos los que sabemos algo de tango, conocemos el tango Remembranzas de Mario, Battistella en la letra y música de Melfi, de 1940, que disfrutamos en su mejor versión, en la voz de Héctor Palacios. Melfi nació en Buenos Aires en 1905 y murió en Francia en 1970. Con el conjunto folclórico “Los de la raza”, en el que estaban Bachicha y Navarrini, viajan inicialmente a España en 1923, para seguir luego hacia París. Allí Melfi se incorpora a la orquesta Bianco-Bachicha, pero poco después forma su propio conjunto que toca en un estilo europeizado. Es autor de Sueña Corazón, Te Amé, y A una madre. Sus grabaciones muy numerosas se extienden desde 1933 hasta 1959 en discos prensados todos en Francia, que han sido recuperados en 4 discos compactos que yo poseo.
MARIO MELFI
Entramos a lo que fue el tango en París en las últimas décadas del siglo XX.
ASTOR PIAZZOLLA
La influencia de París en su vida es indiscutible. Finalizando la década de los 40, había decidido abandonar el tango, del cual ya tenía escritos representativos temas como Prepárense, Para lucirse, Contratiempo, Contrabajeando y Triunfal. En 1953, gana en Buenos Aires un premio con su obra Sinfonía de Buenos aires. Consistió en una beca para estudiar en París con Nadia Boulanger, la principal docente de música clásica en el mundo en ese momento. Todo el año 54 lo pasa a su lado. Al final ella le pide que toque algo de lo que hacía en el tango y él al piano interpreta Triunfal. Ella escucha y le dice: “Aquí está el verdadero Piazzolla. No lo abandone nunca”.
ASTOR PIAZZOLLA
Regresa a Buenos Aires e inicia su controvertida carrera. De regreso a París en 1970 escribe con Horacio Ferrer el oratorio “El Pueblo joven”. En 1986 recibe en París premio por la banda sonora de la película “Tango, el exilio de Gardel”. Este film cuenta la historia de unos argentinos exiliados políticos en París. Tiene muchas escenas de baile, que contribuyeron mucho a afianzar esta modalidad tanguera.
En París el 4 de agosto de 1990 sufre un accidente cerebro-vascular. Sin haber tenido ninguna recuperación muere en Buenos Aires en julio de 1992 a sus 71 años.
Carátula del L.P. TROTTOIRS DE BUENOS AIRES
TROTTOIRS DE BUENOS AIRES (veredas o andenes).
Ese nombre, fue tomado del tango homónimo de Cortázar y Cantón, de 1980 y con él se designó a un famoso cabaret tanguero parisino, que se abrió en 1982, con un éxito nunca visto. Este cabaret, principalmente para bailar, marcó el renacer del tango en París. En Argentina y en el mundo, se hizo a través del espectáculo coreográfico “Tango Argentino”. Muchos dicen que el inicio lo dio ese espectáculo. Lo cierto es que sin la atmosfera de favorabilidad que le suministró Trottoirs, quizás el triunfal ascenso del tango argentino no hubiera sido posible o más difícil de lograr.
TANGO ARGENTINO
Este espectáculo lo crean Claudio Segovia y Orezzolli. Fue una idea que tuvo gestación de varios años. El broche definitivo, la manifestación de que el tango había resucitado con toda plenitud, se dio cuando se presentaron en Broadway, New York en 1985. Se había estrenado en el teatro Chatelet en París en 1983. “Tango Argentino” es fiesta de estilos de danza del tango, los primitivos, los clásicos y los modernos.
FINAL.
El baile estuvo en el nacimiento, la expansión y la resurrección del tango. Se inicia como una manera de bailar la habanera, la milonga y el candombe. El tango como baile lleva al conocimiento y la difusión de este en Europa, Cercano oriente, norte de África y New York. Desde París llega la resurrección del tango en los años 80. Desde esa misma ciudad, con proyección hacia Argentina, el tango se convierte en la música de todos los estratos sociales.
Armenia, agosto 26 de 2022