Agregar valor al café, un propósito que crece en los productores de este grano en el departamento del Quindíoi. Hace cerca de 25 años, casi nadie pensaba en la transformación del café para venderlo en las tiendas locales, regionales, en la nación o por fuera de ella, no como café pergamino o café verde, sino como café tostado y molido, listo para preparar un buen ‘tinto’.
Hoy, según datos conservadores de los propios caficultores, en el mercado del Quindío hay por lo menos 300 marcas de café tostado y molido, provenientes todas de las diferentes fincas de la región. Además, cada vez crecen más las tiendas de café en Armenia y en todos los municipios del departamento.
En La Tebaida, nos encontramos con el caficultor Humberto Marín Marín, que hace sus ensayos para ofrecer un buen café tostado y molido, nacido en las tierras de su finca Riobamba. EL QUINDIANO visitó la finca y encontró esta experiencia…