El hurto de medidores de gas natural continúa en ascenso en el Eje Cafetero, generando preocupación entre autoridades, empresas de servicios y comunidades. Durante septiembre y octubre de 2024 se reportaron 458 y 368 unidades robadas, respectivamente, cifras que reflejan un incremento significativo en comparación con meses anteriores.
Este delito, más allá del impacto económico, representa un grave riesgo para la seguridad pública, ya que la manipulación indebida de las redes de gas puede ocasionar fugas, intoxicaciones o incluso explosiones. Desde enero, el total de medidores hurtados asciende a 2.905, afectando principalmente a Dosquebradas (Risaralda), Manizales (Caldas) y Armenia (Quindío).
En el Quindío, Armenia encabeza las estadísticas con 379 casos, seguida por Calarcá (12) y Circasia (1), según informó Sebastián Vega, gerente jurídico de Efigas. Vega aclaró que la normativa actual estipula que los medidores son propiedad de los usuarios, por lo que la reposición corre por cuenta de ellos y no de la empresa.
La Policía Nacional lidera operativos para identificar y desarticular las bandas responsables del robo de medidores en el Eje Cafetero, apoyándose en los Frentes de Seguridad Ciudadana. Sin embargo, las denuncias de la ciudadanía son fundamentales para entender el modus operandi de los delincuentes y avanzar en las investigaciones.
Efigas también ha intensificado sus campañas pedagógicas, instando a los usuarios a proteger sus medidores y los de sus vecinos. Además, recuerda que la seguridad es responsabilidad de todos y pone a disposición las siguientes líneas para reportar actividades sospechosas:
- Emergencias de gas: 164
- Policía Nacional: 123
- Consulta de personal autorizado: 018000 966 344
Recomendaciones a los usuarios
Se recomienda a los ciudadanos estar atentos a:
- Presencia de personas no autorizadas manipulando medidores o redes de gas.
- Cajas o tapas de válvulas abiertas o expuestas.
- Obras o intervenciones en redes realizadas por personas ajenas a Efigas.
El llamado es a actuar con prontitud ante cualquier irregularidad para prevenir riesgos y garantizar la seguridad de las comunidades afectadas.