Escándalos, riñas y música a elevado volumen hasta altas horas de la madrugada, esta es la situación que denuncian los vecinos del barrio Moravia, al nororiente de Medellín. Aseguran que los bares no tienen control y muy cerca viven personas enfermas.
No aguantan más estos escándalos nocturnos, los residentes del barrio Moravia denuncian que el sector se convirtió en una discoteca abierta sin control.
Reportan, además, que en un establecimiento en particular no respetan ni siquiera un lunes, y que la música suena a todo volumen cada día de la semana.
No suficiente con el alboroto, en la madrugada, los bochinches de personas ebrias agravan la situación y, tanto niños como personas con diagnósticos médicos graves, son los que padecen.
El establecimiento operaría de manera irregular y las autoridades no estarían haciendo nada, según la denuncia, pues les dicen que es una zona de tolerancia y administradora del local se defiende.
Sin dios ni ley, así operan estos establecimientos nocturnos mientras los afectados, muy asustados, claman a las autoridades medidas fuertes.