Anoche, habitantes en condición de calle vandalizaron varias de las obras del maestro Fernando Botero en el Centro de Medellín, al parecer, con la intención de vender el cobre macizo en chatarrerías. El museo de Antioquia elevó su voz de rechazo y pidió a la ciudad cuidar el patrimonio cultural.
La lanza del soldado romano, una de las obras que el maestro Fernando Botero, le donó a la ciudad hace más de dos décadas, ya no está. La barra de bronce macizo fue mutilada en horas de la madrugada con una segueta de gran calibre por presuntos habitantes en condición de calle que tendrían la intención de venderla.
La mujer con espejo, otra de las emblemáticas obras de Botero, también sufrió un intento de mutilación similar, ataques que se suman al vandalismo del que ha sido víctima la plaza Botero en los últimos meses, por lo que el llamado es a cuidar de nuestro patrimonio.
Luego de la denuncia, la Policía ubicó algunas de las piezas que habían sido hurtadas y se espera que en las próximas horas sea devuelta al Museo de Antioquia.
La Plaza Botero, además de ser el lugar donde se alojan las esculturas declaradas como patrimonio nacional, se ha convertido en la puerta en la que Antioquia se encuentra con el mundo.
