El hecho se registró en Tuluá en donde los periodistas fueron amedrentados con una granada y dejados en libertad 20 minutos después.
Varios colectivos de comunicadores han rechazado la situación que vivió un equipo de televisión y una reportera en el Valle del Cauca.
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Los periodistas pertenecen al programa ‘Testigo Directo’ de Rafael Poveda, que estaban realizando un trabajó en Tuluá, en el centro del Valle del Cauca, a unas dos horas de Cali.
Los comunicadores se encontraban recogiendo imágenes y testimonios para un documental sobre infancia y adolescencia.
Un hombre perteneciente a una banda delincuencial se les acercó y ellos le explicaron que eran de prensa y estaban trabajando.
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Pero el hombre, que se mostraba alterado, sacó lo que sería una granada y dijo que no se podían ir porque de lo contrario todos volamos.
En esa incómoda y terrible situación estuvieron por 20 minutos, hasta que los dejaron ir.