La inflación en la ciudad de Armenia experimentó un notable aumento durante el mes de julio de 2024, alcanzando el 0.47%. Este incremento es significativo, especialmente en comparación con los meses anteriores, donde la inflación fue del 0.37% en mayo y 0.35% en junio.
Este comportamiento posiciona a Armenia como la ciudad con mayor inflación en el Eje Cafetero, superando a Ibagué (0.11%), Manizales (0.12%) y Pereira (0.14%). A nivel nacional, la capital quindiana se ubicó en la segunda posición, muy por encima del promedio nacional de 0.20%.
En lo que va del año (enero a julio de 2024), la inflación acumulada en Armenia es del 4.36%, un dato ligeramente superior al promedio nacional del 4.32%. En comparación, Ibagué presenta una inflación acumulada de 3.93%, Manizales de 3.63% y Pereira de 4.64%.
Al observar la inflación anual (agosto 2023 – julio 2024), Armenia también muestra cifras preocupantes con un 6.89%, solo superada en el Eje Cafetero por Pereira con 6.94%, mientras que Ibagué y Manizales reportan tasas del 5.89% y 5.91% respectivamente. A nivel nacional, la inflación anual fue del 6.86%, lo que evidencia que la capital quindiana está por encima de la media nacional.
En el desglose de la inflación de julio, los alimentos lideraron el alza en los precios con un incremento del 0.98%, seguidos por el sector de alojamientos con un 0.62% y el rubro de recreación con un 0.51%. En contraste, las comunicaciones registraron una ligera disminución del -0.16%, mientras que los sectores de transporte, enseres y educación no mostraron variación alguna.
La ciudad de Armenia también presentó el mayor incremento en el índice de precios de la RAP Eje Cafetero, impulsado principalmente por los aumentos en los precios de alimentos y alojamientos. La presión inflacionaria en Armenia se ha visto exacerbada por un mercado laboral relativamente estable y un aumento en las remesas internacionales, factores que han mantenido la demanda de bienes básicos, como alimentos y arrendamientos, en niveles altos.
“Este aumento en el costo de los alimentos básicos está poniendo en jaque a las familias, que ven cómo su capacidad de compra disminuye rápidamente. El impacto es aún mayor en los hogares más vulnerables, donde estos productos constituyen la base de la alimentación diaria”, expresó Carolina Torres, economista a QUINDÍO NOTICIAS.
La situación plantea un desafío considerable para la economía colombiana, que ya venía enfrentando dificultades en su recuperación post-pandemia. Los consumidores, por su parte, se encuentran cada vez más asfixiados por el incremento en los precios de productos esenciales, mientras esperan soluciones que permitan estabilizar el costo de vida.