El Grupo Bancolombia y la actividad Finanzas para la Equidad de la Agencia de EE. UU. para el Desarrollo Internacional – Usaid se encuentran en Nariño desarrollando el Sistema Rural Emergente, una iniciativa concentrada en fortalecer la educación e inclusión financiera, y que surge como una evolución del Laboratorio de la Ruralidad de Bancolombia, estrategia pionera de innovación e inclusión social en el sector financiero del país. En este contexto, y mediante un diagnóstico territorial realizado por el Centro de Estudios Regionales Cafeteros y Empresariales, se identificó que, aunque 71% de la población de Nariño posee al menos un producto financiero, territorios rurales como Santa Cruz, Ricaurte, Aldana y Sapuyes cuentan con un nivel bajo de educación y de acceso a servicios financieros. Como resultado, muchos ciudadanos recurren a estructuras financieras informales, como el ‘gota a gota’, una modalidad ampliamente conocida por la población. Así pues, los habitantes de esta región manifiestan que requieren mayores conocimientos en alternativas para la generación ingresos, uso de productos financieros y manejo del endeudamiento. También solicitan alfabetización digital y orientación para el emprendimiento y el trabajo en equipo. “Para lograr una verdadera inclusión financiera debemos seguir eliminando las barreras de acceso y priorizando la educación para un uso responsable y adecuado de los servicios financieros. Esto es clave para que las personas puedan aprovechar beneficios adaptados a sus necesidades, participar activamente en la economía formal y asegurar el bienestar de sus familias. Esto en conjunto se traduce en progreso y desarrollo sostenible para la región”, comenta Luz María Velásquez, vicepresidenta de Negocios Personas, Pymes y Empresas de Bancolombia. Con ese fin, las entidades involucradas en este proyecto vienen diseñando de la mano de las comunidades y otros actores locales soluciones colaborativas de educación que contribuyan al cierre de brechas para aumentar y mejorar la oferta de productos y servicios financieros, entre ellas: El programa de educación financiera rural “Cuentas sin Cuento”, de la Fundación Bancolombia, que busca que las comunidades optimicen sus recursos, mejoren sus conocimientos en finanzas personales y de su negocio para tomar mejores decisiones financieras. Este busca impactar a 4.000 beneficiarios en el territorio. También, estrategias de educación financiera masiva, como charlas y talleres presenciales ajustados a las necesidades de asociaciones productoras de leche, papa, hortalizas, entre otras, y espacios para aprender sobre el uso de herramientas digitales como el Código QR de Bancolombia. De la misma manera, con el objetivo de fortalecer las relaciones entre instituciones y líderes comunitarios, se creó una mesa intersectorial para promover la educación y la inclusión financiera, impulsar el emprendimiento local y apoyar a pequeñas unidades productivas y asociaciones de Nariño. De esta mesa, y con la participación de emprendedores, líderes comunitarios, líderes indígenas y jóvenes, han surgido también ideas como la creación de historias para acercar a las comunidades a la educación financiera. El Sistema Rural Emergente hoy hace parte de la actividad Finanzas para la Equidad de Usaid, que tiene como propósito impactar a cerca de 22.000 nariñenses en condiciones de vulnerabilidad financiera con programas de educación, productos y servicios inclusivos, así como experimentos para mejorar la inclusión financiera. Para alcanzar la meta, se aportarán en el marco de este proyecto recursos por más de 2.500 millones de pesos. El impacto esperado con este proyecto es, además de una formación masiva en educación financiera, la posibilidad de que miles de nariñenses sean bancarizados y la movilización de productos de crédito para actividades productivas en la región, además de aumentar la transaccionalidad promoviendo el uso de canales digitales. Hasta la fecha, se han desembolsado alrededor de 1.000 millones de pesos en créditos en 8 de los 13 municipios del proyecto. Justo para lograr la meta de créditos se han abordado diferentes opciones, como Crédito A la mano de Bancolombia, préstamos mediante encadenamientos productivos y otras alternativas de financiación adaptadas al territorio. |