Más atención para las comunidades migrantes pidieron voceros comunitarios del municipio de Pasto a las autoridades, para mitigar parte de las necesidades de los extranjeros que hicieron de las calles sus hogares.
“Alrededor de 70 venezolanos sobreviven a partir del rebusque o de ciertas actividades de mendicidad”, manifestó el líder comunitario y gestor cultural Germán Ordóñez.
Indicó que si bien es cierto en el municipio se activaron los planes de contingencia para garantizarles respeto por sus derechos fundamentales, dijeron que las necesidades se acentuaron en esta pandemia.
Añadió que para sobrevivir varios de ellos viven hacinados en modestas viviendas casas que arriendan en la periferia de Pasto.
Indicó que para satisfacer las necesidades básicas de los menores de edad, sus padres se dedican al rebusque en los semáforos de las diferentes avenidas de Pasto. Para mitigar parte de las necesidades básicas de los migrantes destacaron que en algunos sectores las autoridades eclesiásticas les suelen brindar ayudas alimentarias.
