“Él la amenazaba y le decía que si no era para él, no era para nadie”

Ante el macabro hallazgo del cuerpo de Gina Paola Rivera Toloza, su familia cree que el presunto responsable de su muerte es su expareja sentimental. 

“Si no eres para mí, no eres para nadie”, es la frase que se escucha una y otra vez cuando se conocen casos de feminicidios en el Atlántico. 

La reincidencia no fue la excepción en el caso de Gina Paola Rivera Toloza. Su hermana, Irene Toloza, reveló  hoy que la fallecida era amenazada por su expareja sentimental con esta frase. 

Las acusaciones en contra del hombre, de ser el presunto responsable de su muerte, parten después de que fue la última persona que la vio con vida. 

“Él fue la última persona que la vio el día que ella desapareció. Él la amenazaba, cada vez que ella salía del trabajo la acosaba, le decía que si no era para él, no era para nadie y siempre la perseguía. Ella varias veces nos comunicó, incluso yo le dije que yo la acompañaba, que le pusiera una denuncia para que no llegara hasta donde llegó”, indicó la joven.

En medio de las declaraciones, Irene recordó la actitud que la expareja de Gina tuvo cuando supo sobre su desaparición. 

“El hijo de ella llama a la casa y pregunta, abuela mi mamá no ha dormido allá, ella le dijo, no papi, si ella vive con ustedes, él le dijo, ah, porque ella no ha venido a dormir aquí. Yo después publiqué la foto de ella, y él viene y se acerca a nosotros y nos dice, ¿como así que Gina está desaparecida? si ella ayer estuvo conmigo, yo le compré un televisor, le di 900 mil pesos para que ella le festejara el cumpleaños a la niña, porque la niña cumplió el 22 de julio, ella se fue a las 9 de la noche y yo le dije que yo la llevaba, porque era el día de la Virgen del Carmen y era peligroso el día y ella no quiso. Nosotros quedamos como con la duda, preguntamos a vecinos y los vecinos dijeron sí, ella ingresó, pero más no la vimos salir del apartamento”. 

La hermana de Gina aseguró el hombre no fue visto como sospechoso por las autoridades pues le decían “que él no tenía cara de sospechoso, que su cara se veía que también estaba preocupado, uno le preguntaba y él lo que hacía era llorar, que él también quisiera saber dónde estaba ella para él ayudarnos a buscarla”. 

Gina Paola Rivera Toloza, era madre de tres hijos, era operaria de producción y residía en el barrio Caribe Verde. 

“Era una persona muy alegre, no se metía con nadie y muy buena gente”, agregó su hermana.