Apenas hijo de José Trocha inscribió un emprendimiento «comenzaron llamadas extorsivas»

«Extorsión carcelaria sin fin», el concejal José Trocha pide al Inpec «controlar a presos».

Un grave hecho denunció el concejal de Barranquilla José Trocha a raíz de las amenazas que recibió ayer cuando sesionaba en la comisión tercera.

Tras ese episodio, el político advirtió que por un emprendimiento familiar en un local pequeño en Villa Olímpica, «a él (el hijo) le tocó hacer la inscripción en la Cámara de Comercio, dejó sus datos y de ahí, nos comenta la Policía, que ellos toman la información».

Los hechos

Eran las 3:30 de la tarde de este miércoles cuando el hijo del Concejal José Trocha recibió una llamada intimidatoria de una persona que aseguraba ser «integrante del ‘Clan del Golfo'».

Al joven, quien cursa estudios universitarios en Barranquilla y su hermana iniciaron un emprendimiento y les exigían $5.000.000, supuestamente para la adquisición de una munición «so pena de asesinarlo». Acto seguido, el joven se comunicó con el papá.

«Él me llamó inmediatamente asustado, como es normal. Yo les dije que les entregara mi número para que me llamaran a mi directamente. A los 8 minutos me llamaron. Yo lo primero que les dije fue: «Yo soy concejal de Barranquilla esta situación me toca ponerla en conocimiento de las autoridades»».

Fue en ese momento en el que el supuesto integrante del ‘Clan del Golfo’ «se explayó» en sus en sus amenazas contra la integridad de Trocha y su familia. 

Lo que puso más irascible al interlocutor del político fue cuando le dijo que lo estaba grabando y que esa amenaza iría a los medios.

«Casualmente yo acababa de hacer una intervención, aproveché para hacer la denuncia pública», señaló.

Tras el hecho, según dijo, el comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla quien lo visitó en su casa de Galapa, le informó «que era una llamada de extorsión carcelaria, y eso nos pone a pensar sobre el papel del Inpec».

«El Inpec es una entidad que es ineficiente, incompetente, no es capaz de hacer un control efectivo en los centros de reclusión y terminan sindicados y condenados atormentando a los que se dedican a una actividad comercial» señaló.