Ahora las calles son más seguras: pille lo que llegó a revolucionar la forma de vivir en Bogotá

El 7 de diciembre de 1889 se inauguró el primer alumbrado público con luz eléctrica en Bogotá.

Este evento fue un muy importante en el desarrollo del país, ya que marcó el inicio de la era de la electricidad. Hasta ese momento, las calles de la capital de Colombia se iluminaban con faroles de gas o con velas. La luz eléctrica era una tecnología nueva y revolucionaria que prometía mejorar la seguridad y la calidad de vida de los ciudadanos.

En Bogotá, la empresa encargada de instalar el alumbrado público fue la Compañía de Alumbrado Eléctrico de Bogotá, fundada por el futuro general y presidente de Colombia, Pedro Nel Ospina. La empresa instaló inicialmente 90 focos de 1.800 bujías cada uno, que iluminaban las principales calles de la ciudad.

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El alumbrado público tuvo un impacto inmediato en la vida de los bogotanos. Las calles se volvieron más seguras y los ciudadanos podían moverse con más facilidad por la noche. Además, la luz eléctrica atrajo a nuevos negocios y actividades a la ciudad.

Sin embargo, el alumbrado público también enfrentó algunos desafíos. En los primeros años, hubo casos de vandalismo y robo de los postes y los cables de luz. Además, el servicio era costoso, lo que limitaba su acceso a los sectores más pobres de la población.

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A pesar de estos desafíos, la llegada del alumbrado público a Colombia fue un evento trascendental. La luz eléctrica cambió la forma en que los bogotanos vivían y percibían su ciudad.

Algunos datos adicionales

• La instalación del alumbrado público en Bogotá fue un proyecto ambicioso y costoso. La empresa encargada del proyecto tuvo que importar equipos y materiales desde Europa.
• La luz eléctrica se instaló inicialmente en las principales calles y avenidas de Bogotá. En los años siguientes, el servicio se extendió a otras zonas de la ciudad.