Cerca de 500 indígenas de los resguardos Palmira y Canchidó, del municipio de Pueblo Rico, están confinados en esta última zona debido a que, según sus denuncias, han sido víctimas de amenazas por parte de personas armadas que, al parecer, pertenecen al ELN.
El personero de esa localidad, Danilo Mejía, manifestó que la incertidumbre y el temor de estas comunidades crece constantemente por el accionar de los grupos ilegales en límites con el departamento del Chocó.
«Ellos dicen que es por las amenazas de grupos armados al margen de la ley que hacen presencia en ese sector, que es muy aledaño al departamento del Chocó y allá sí hay presencia de dichos grupos», puntualizó Mejía.
Este es el tercer hostigamiento a comunidades indígenas del occidente de Risaralda reportado durante el 2021; por eso, las autoridades locales pidieron mayor presencia de la fuerza pública en esa zona para garantizar su seguridad.
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