Dos barrios de Guática (Risaralda) están en alerta por posible avalancha

Sin duda, el occidente de Risaralda es la zona con mayor probabilidad de que ocurran deslizamientos de tierra y represamiento de los afluentes debido a las fuertes precipitaciones que se reportan; de hecho, en el municipio de Guática las autoridades tuvieron que declarar la calamidad pública debido a que hay un inminente riesgo de avalancha que tiene en alerta a los habitantes de los barrios Acacias y Obrero.

El alcalde de esa localidad, William Soto, explicó que con esta decisión se busca gestionar recursos ante el Gobierno Nacional para iniciar con planes urgentes de mitigación del riesgo.

«Por la ola invernal se ha generado una afectación enorme, hay un riesgo de avalancha sobre el sector de La Virgen, en un lote de terreno adyacente al corregimiento de San Clemente», añadió el mandatario local.

Es importante resaltar que varios municipios de Risaralda están actualmente declarados en calamidad pública debido a las emergencias que han tenido que enfrentar; entre ellos Quinchía, La Virginia, Santa Rosa de Cabal, Dosquebradas y Balboa. Asimismo, el departamento continúa en calamidad pública desde el mes de diciembre del 2020.

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El mes de septiembre ha traído consigo un aumento significativo de las lluvias en la región andina y, específicamente, en Risaralda; aunque el 100 % del departamento está en riesgo de derrumbes y está siendo monitoreado por parte de los organismos de socorro, hay siete municipios en los que se debe prestar atención especial ya que la alerta es naranja.

Así lo dio a conocer la coordinadora encargada de Gestión del Riesgo, Ximena Carmona, añadiendo, además, que el Ideam está alertando sobre posibles crecientes súbitas de los ríos Otún y Risaralda.

En la región cafetera las lluvias podrían extenderse hasta finales del año; por eso, las autoridades han recomendado a los ciudadanos que viven a orillas de los ríos o en las laderas de las montañas estar atentos y, en caso de evidenciar alguna situación irregular, informar de inmediato a los cuerpos de bomberos, a la Defensa Civil o a los organismos de gestión del riesgo de desastres.