Nuevas denuncias contra rector de UniQuindío por persecución laboral

El sindicato de Trabajadores Administrativos de la Universidad del Quindío denunció nuevas persecuciones laborales a sus afiliados por parte del rector de la institución educativa José Fernando Echeverry Murillo.

“En aras de buscar una Universidad con libertades, justicia y democracia para todos, la Junta del Sindicato SINTRAADMIN ha venido denunciando varios hechos irregulares, como contratación, carrera administrativa, pensiones entre otros, ante las respectivas agencias de control estatales. A raíz de estos y del fallo de acción de cumplimiento del año 2013 sobre carrera administrativa por méritos, hemos venido siendo objeto de persecución laboral, sindical, por parte de la administración actual de la Universidad del Quindío, en cabeza del rector José Fernando Echeverry Murillo”, dice el sindicato en un documento que hizo público este viernes.

El sindicato denuncia una persecución sistemática por parte del rector Echeverry: “Hace más de 25 años no se hacían concursos de méritos en la Universidad del Quindío, pues la planta de personal se venía manejando de una manera clientelista, nepótica y subjetiva, de manera gamonal y sujeta a los caprichos del rector de turno. Durante estos años muchos funcionarios fallecieron, jubilaron, se pensionaron otros, quedando estos cargos vacantes los cuales no se sacaron a concurso”.

Sin embargo, sostiene el sindicato, “se sacaron 21 cargos a concurso abierto de méritos en el año 2021, no se conoce el porqué, existiendo en la planta de personal cargos vacantes sin titulares ni ocupados en provisionalidad, extrañamente salieron a concurso cargos ocupados, bien sea por personal provisional o con vacancia temporal de sus titulares de carrera. ¿Porque no se optó por suplir las vacantes sin personal en el cargo? Caso similar ha sucedido con los cargos en ascenso que, extrañamente, fueron afectados por el proceso casi secreto que siguió el operador del concurso”

Las dudas del concurso

El sindicato cuestiona el concurso realizado para proveer los cargos. “Múltiples quejas sobre el manejo dado a los concursos por parte del operador – Unipamplona – y consecuentemente el silencio del interventor del contrato – Uniquindio – dan cuenta de que algo huele mal en dicho proceso. Situaciones que los jueces si bien han indicado un escenario diferente a la tutela, no han desestimado de ninguna forma lo allí denunciado. De los cargos ofertados tanto en concurso abierto como de ascenso, reiteramos, extrañamente cercano al 50% pertenecen a personal afiliado a Sintraadmin”

Ley de Garantías

El sindicato también denuncia otras violaciones prohijadas por el rector Echeverry: “De los despidos notificados el día 10 de febrero/2022, oh sorpresa! 3 corresponden a miembros de la Junta de Sintraadmin: Oswaldo Tabares Mejía – vicepresidente, Edgar Salazar Ríos, Fiscal, y María Elvira Moreno Betancur, tesorera, siendo esta última compañera perseguida, amenazada y obligada a renunciar debido a problemas de salud, ocasionados por este proceder enfermizo en contra de Sindicato y en forma directa a su persona. Otros compañeros más de la base sufrieron la misma suerte, siendo demasiados los trabajadores que han sido sometidos a este tipo de ultrajes por parte del rector, afectando su salud mental, estabilidad laboral y la economía familiar derivada de su empleo. ¿Será que la anarquía, autonomía Universitaria da para desconocer la Ley de garantías en cuanto a despidos y movimientos de personal en su vigencia?”

 Una reestructuración

También se denuncia una reestructuración que ha concebido la rectoría de Echeverry: “Y como cereza del pastel, de la nada se gesta una reestructuración nacida de la desinformación, de criterios falaces para lograr del Consejo Superior su aprobación, estableciendo entre otros pormenores que la Universidad adolece de estructura funcional desde los años 80. ¿Seria “pertinente” preguntarle al señor rector… en que Universidad está? Ya que desde ese entonces la Universidad ha sufrido cambios estructurales profundos y consecuentemente en su nómina. ¿Será entonces que la acreditación y reacreditación institucional se ha cimentado en mentiras que muestran la solidez y vanguardismo de una Universidad… Ochentera?”

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