La butaca de los 5 colores. ¿Qué significa la simbología de Juan Miguel? | Opinión por: Finito

Juan Miguel Galvis Bedoya presentó su candidatura a la Gobernación del Quindío ante una multitud que lo ovacionó en Armenia. Pero hubo algo curioso, lo hizo con una butaca en sus manos, un símbolo que hoy explicaré de qué se trata.

El avalado por el partido Creemos y coavalado por Colombia Justa Libres abordó el tema en un comunicado: “la butaca es una base sobre la que nos podemos apoyar, estar estables, sentarnos para aprender, para disfrutar una charla amena, para tomar un libro y viajar por mundos distintos, para alimentarnos con el pan que hemos podido llevar a la mesa, para pararnos sobre ella y tomar con nuestras manos algo que pensábamos inalcanzable; sirve para esto y mil cosas más. La butaca es una extensión de nuestro cuerpo, la cual es sostenida por 5 pilares”, dijo.

Cada uno de esos pilares, de colores distintos, representan valores fundamentales para el desarrollo del Quindío. “El rojo es amor, lo que ponemos en cada acción por nuestra tierra y nuestra gente; el azul es respeto, lo fundamental para construir un camino inclusivo donde todas las personas se sientan valoradas; el naranja es compromiso, el propósito por trabajar arduamente por el bienestar de todos y cada uno de los quindianos; el verde que nos rodea es honradez, la inspiración a ser transparentes en nuestras acciones y a luchar contra la corrupción que tanto ha afectado nuestra tierra, y el amarillo es la esperanza, el motor que nos impulsa a creer en un futuro mejor y a trabajar juntos para lograrlo”.

Aquí un dato curioso. ¿Por qué allí la esperanza es amarilla y no verde? Simboliza “el sol que nos alumbra cada día y permite que el verde de nuestros campos exista; es como el guayacán florecido que nos representa y como el oro de las obras maestras de los quimbayas, es como la franja que en el centro de nuestra bandera une al verde de nuestras montañas con el púrpura de los granos del mejor café del mundo”, manifestó.
Galvis agrega: “Unidos, estos colores conforman un arcoíris, que es positivismo, inclusión y esperanza, y ¿qué hay al final de los arcoíris?, según las leyendas de las culturas ancestrales, hay tesoros, y en este caso ese tesoro no es otra cosa que un Quindío mejor; otros, más apegados a la ciencia, dirán que en realidad este se produce por refracción, cuando la luz atraviesa gotas de agua: luz y agua, dos símbolos de nuestro ‘Corazón Verde’, la que ilumina nuestro camino y la que nos da vida”. Hoy todos hablan de la butaca que apareció en la tarima en la que Juan Miguel hizo su presentación frente un mar de gente que sueña con un Quindío mejor.