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El toque de queda nocturno fue suspendido el lunes en la noche tras una reunión en el Concejo de Chinchiná con comerciantes del Centrosur de Caldas y delegados de la Asociación de Bares de Colombia (Asobares).
El anuncio lo hizo el gobernador de Caldas, Luis Carlos Velásquez; quien lideró la reunión a la que también asistiron el alcalde de Chinchiná, Eduardo Andrés Grisales, y algunos concejales.
Según el gobernador, en diálogo con los comerciantes acordaron que este fin de semana no habrá toque de queda ni otras restricciones para el comercio en el departamento.
Informó de la llegada, en los próximos días, de 17 camas aportadas por el Ministerio de Salud para la atención de pacientes covid. “Creo que es un gesto de confianza y cercanía, esperamos que la economía poco a poco se recupere, queremos hacer este fin de semana un ejercicio de reapertura comercial”.
Agregó que seguirán concertando medidas con los comerciantes, de la mano de la Dirección Territorial de Salud de Caldas y del Comité Integremial de Caldas, teniendo en cuenta las particularidades de cada municipio. «Si las cosas siguen como se registó el lunes en la noche -85% a 86% de ocupación de UCI- las medidas serán más flexibles. Para ello cada semana se estará monitoreando la situación».
Estas decisiones van dirigidas a apoyar al comercio, como parte de la reapertura económica de forma gradual y segura, respetando las medidas de bioseguridad que los ministerios de Salud y del Interior exijan.
