Esta vez la comunidad no estaba buscando a la Policía para que atendiera un caso de homicidio, un robo o un problema de violencia intrafamiliar, sino para que ayudara a una madre a tener a su hijo.
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La curiosa y bonita historia ocurrió en el nororiente de Medellín. Sobre las 5:30 de la madrugada de ayer, cuando el patrullero Yeremith Arcón Miranda se encontraba finalizando su turno, varios ciudadanos se acercaron al CAI de Bello Oriente y le pidieron que los ayudara con un trabajo de parto que se estaba llevando a cabo en una casa aledaña.
El uniformado se desplazó al lugar y encontró que no había posibilidad de llevar a la mujer, de 21 años de edad, a un hospital, porque se encontraba con las contracciones y por su nivel de avance no le daba tiempo de trasladarla.
Por tal razón se puso la ’10’ y ayudó a la mujer a dar a luz a Juan Pablo, contó el subcomandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, coronel Rolfy Mauricio Jiménez Páez.
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Ya con el recién nacido entre sus brazos, el uniformado guardó la placenta en una bolsa y al no contar con los elementos adecuados para cortar el cordón umbilical, sacó a la mujer hasta donde llegan los carros, la montaron en uno de ellos y la trasladaron a un centro médico, en donde los galenos terminaron el procedimiento.