Hace cerca de un año que la Superintendencia de Salud puso en el hospital La Misericordia de Calarcá un agente de su despacho, para que oficiara como gerente, tras la crisis de esta entidad, que estuvo cerrada durante algún tiempo. Todo indicaba que esa era la solución a los grandes problemas financieros, especialmente a las fugas de dineros a través de la corrupción. Sin embargo, todo parece indicar que la situación en vez de mejorar, empeora.
El diputado de la Colombia Humana Luis Carlos Serna denunció que no solo el gerente se puso un sueldo cercano a los $21 millones de pesos mensuales, sino que, además, contrata personal de su región, Santander, y de Cundinamarca, con honorarios superiores a los $15 millones de pesos, para tareas que no sobrepasan los 15, 20 o 30 días, mientras que a los profesionales de la región se les paga ‘salarios de hambre’.
Tras las denuncias, el diputado Serna recibió insultos e improperios del señor gerente encargado del hospital, Fredy Orlando Rojas Arias.
EL QUINDIANO habló con el diputado Serna a través de nuestro Podcast